Lanzan campaña de tatuajes a cambio de botitas
ESPACIO LIBRE
En tiempo de crisis, cuando el paro crece irremediablemente y cuando las salidas profesionales se reducen a la mitad en muchos ámbitos y áreas profesionales, es momento de buscar alternativas. Una de las opciones más recurridas a la par que arriesgadas es la creación de una PYME, un negocio particular que nos garantiza trabajo, si bien no supone un seguro de viabilidad y éxito.
En México y en nuestra ciudad, las Pymes (Pequeñas y medianas empresas) son una realidad, éstas son resultado de ideas brillantes y/o proyectos valientes creados normalmente por emprendedores, que con más ganas que presupuesto ponen a prueba su talento y perseverancia para hacer que su empresa prospere.
Las Pymes, por encima de cualquier negocio, deberían formarse a partir de la detección de una necesidad.
Me atreverla decir que un alto porcentaje de las Pymes que nacen en este país y sobre todo en Tapachula, se forman a partir de situaciones fortuitas como: Me rentan un local muy barato, Mi esposa hace unos pasteles riquísimos, o simplemente: Siempre he querido abrir un restaurante.
Estos motivos son válidos, pero llevan un riesgo mayor porque deben insertarse en un mercado que probablemente no los necesita (en dicho tiempo y espacio).
Lo ideal sería crear un negocio a partir de identificar un síntoma, una necesidad o un dolor en la gente cercana al negocio que haríamos.
Una gran diferencia entre una empresa grande y una Pyme es que la primera puede llegar a modificar hábitos, crear nuevos y hacer que sus clientes de adecuen a sus condiciones.
A pesar que en nuestro país existen 4 millones de Pymes en los 3 diferentes sectores (industrial, comercio y servicios), datos como que el 65% de éstas son de carácter familiar, el 80% no cuentan con ninguna certificación, cerca del 50% de éstas no utilizan técnicas de calidad o productividad, no son muy alentadores si de crecimiento económico hablamos.
Además la mayoría de las Pymes no cuentan con una estructura organizacional adecuada al carecer de puestos definidos y sin tomar en cuenta la planeación o tomar en cuenta ideas importantes como la Mercadotecnia, o Recursos Humanos, lo que provoca que no tengan solidez financiera y no sean sujetos de crédito de manera expedita y accesible.
Lamentablemente si su creación la vemos como paliativos, soluciones temporales y no como opciones reales para generar empleo y desarrollo económico, será muy difícil que la situación actual se pueda revertir en el corto o mediano plazo y éstas se conviertan en una verdadera solución ante la falta de empleo.