Evangélicos expulsados exigen justicia y alto a la persecución religiosa

SAN CRISTÓBAL DE LAS CASAS, Chis., 24 de septiembre de 2016.- Al cumplirse dos meses de que 16 familias evangélicas fueran expulsadas de su comunidad, por negarse a cooperar para la fiesta católica, exigen justicia ya que este caso como otros de persecución religiosa siguen impunes, señaló Luis Herrera, representante de la Coordinación de Organizaciones Cristianas.

Señaló que esto ocurrió en el ejido Gabriel Leyva Velásquez, municipio de las Margaritas en donde, no sólo fueron desplazados, sino que también eran multados y obligados a cooperar, sufrieron encarcelamientos y fueron amenazados con quemarlos con gasolina.

Dijo que de acuerdo al testimonio narrado de don Fernando J. H, tanto él como toda su familia, su esposa e hijos, fueron víctimas de persecución religiosa tal y como narra a continuación.

«Como pasaba el tiempo y no conseguíamos el dinero para sacar a mi familia de la cárcel, los encarcelaron otras 24 horas y como pasaba más tiempo y no se le daba el dinero, rociaron con gasolina la cárcel de madera, con 20 litros, con la intención de quemarlos en la madrugada.

Acabaron con una caja de cerrillos, pero no encendió, milagro de Dios. Mi hijo pequeño empezó a gritar y mi esposa le dijo hijito no tengas miedo, vamos a orar a Dios y fue ahí donde no prendieron los cerillos, por la bendición de Dios, no ardió», expuso.

Ante esta situación, la Coordinación de Organizaciones Cristianas, informó que a pesar de que las autoridades han sido notificadas de estos casos de persecución religiosa, sigue habiendo intolerancia y se violenta la libertad de credo.