De Primera Mano/Rodulfo Reyes Aguilar

¿Caerá Núñez?  

En Tabasco  

Ahora que el régimen de la llamada ‘Cuarta transformación’ ha comenzado la cacería del expresidente Enrique Peña Nieto,  

en el entorno de Arturo Núñez Jiménez hay confianza en que este no correrá la misma suerte que su antecesor Andrés Granier Melo, pues se tiene la certeza de que el mandatario Andrés Manuel López Obrador cumplirá el acuerdo “no escrito” logrado en las elecciones de 2018.  

De acuerdo con allegados al esposo de Martha Lilia López Aguilera, el perredista “cerró bien” su gestión: en forma trimestral hacía que la federación auditara los recursos que la Secretaría de Hacienda enviaba a Tabasco, de tal manera que no se podría volverle a revisar su cuenta pública.  

Pero más allá de cualquier consideración de tipo legal y jurídica, el equipo de Núñez estima que hay un pacto con López Obrador, el cual se puso de manifiesto en los comicios de hace dos años, cuando fue evidente el acercamiento entre Morena y el entonces gobernador.  

Por eso Núñez se abstuvo de involucrarse en la jornada, y en correspondencia el candidato morenista a la gubernatura, Adán Augusto López Hernández, a cada rato le hacía reconocimientos públicos por “mantenerse al margen”.  

Como si Núñez le hiciera un favor a la democracia y no fuera parte de su trabajo no involucrarse en temas partidistas, terminó su gestión con el halo de “hombre de Estado” gracias al discurso morenista de campaña.  

Vaya, hasta su esposa, en su condición de presidenta del DIF estatal, recibió felicitaciones por sus programas sociales, los cuales –prometió el aspirante a la gubernatura– serían convertidos en leyes cuando Morena ganara las elecciones.  

Pero tras el triunfo del partido de López Obrador la realidad alcanzó a las nuevas autoridades y el vencedor de los comicios y luego mandatario electo empezó a revelar la podredumbre hallada en las arcas que, además, dejó vacías el letrado político perredista.  

La absolución a cualquier señalamiento en contra de Núñez llegó el 23 de agosto del año pasado, cuando, en la capital tabasqueña, el jefe de la nación aseguró, durante su conferencia de prensa matutina ofrecida en la 30 Zona Militar, que el marido de Martha Lilia no iba a ser perseguido, ya que, dijo, no era partidario de “las venganzas políticas”.  

La petición de que Núñez sea enjuiciado es una demanda de justicia ante la evidencia de que su administración saqueó al estado, según ha dicho no una sino varias veces Adán Augusto.  

La esperanza de que sea procesado el político perredista, a quien diversos sectores consideran el peor gobernador que ha tenido Tabasco, tiene su origen en dos puntos: 1.- López Obrador no cumple acuerdos y ahí está el caso del expresidente Peña Nieto; 2.- Si la calificación del mandatario de Tabasco no detiene su franca caída, se va a necesitar darle “circo” al pueblo trayendo a la pareja para ser juzgada en el Edén.  

Otra consideración, además, es que López Hernández no está de acuerdo con el manto protector que le ha tendido el presidente a Núñez, y sabe que el “perdón” a este y su cónyuge lo pondría en camino al basurero de la historia.  

PARA SU INFORMACIÓN…  

EL EX SECRETARIO de Desarrollo, Pedro Jiménez León, anda en plena promoción de su nuevo cargo en un partido político chico. ¡Como nadie lo ha molestado por el caso de las investigaciones por la condonación de un préstamo de 30 millones de pesos que la administración pasada le hizo a la Unión Ganadera Regional de Tabasco (UGRT)!