TELEFONO ROJO/ José Ureña

* Lázaro desaira a la funeraria Jesús Ortega
* Las tribus no accedieron a sus condiciones
* Los Chuchos ya perfilan a Jesús Zambrano
　
　

Ayer Lázaro Cárdenas simplemente confirmó lo adelantado a usted en este espacio en dos ocasiones.
No buscará dirigir al Partido de la Revolución Democrática (PRD) por una razón y un argumento diplomático.
La razón: Jesús Ortega deja al peor PRD en más de cuatro lustros.
El pretexto político: está dedicado a proyectos sobre migración y derechos humanos.
Lázaro dijo ayer en Morelia:
“Tengo la obligación de concluir esta tarea que yo estimo concluirá en el mes de junio y a partir de entonces estaré acá (en México) participando en la política del país, apoyando a los candidatos del PRD en el estado de México y aquí en Michoacán, en donde el PRD no puede darse el lujo de perder”.
El 8 de diciembre pasado leyó en este espacio el título: “La dirigencia imposible de Lázaro en el PRD”.
En aquel despertar decembrino Andrés López, Marcelo Ebrard, René Bejarano y muchas tribus más empezaron a pedirle el favor a Lázaro.
No dio muchas esperanzas.
　
　
LAS RESPUESTAS DE CUAUHTEMOC
　
　
No desistieron y recurrieron Cuauhtémoc Cárdenas.
Escribimos entonces:
“A Cuauhtémoc Cárdenas no le desagrada la idea de ver a su hijo al frente del partido.
“En un intento de reconstrucción, debiera decirse.
“Para todas las tribus tuvo respuesta de escepticismo.
“Les recordó su paso en la dirigencia, cuando luchó infructuosamente contra las corrientes, el reparto de cuotas de poder al interior y en los gobiernos -el GDF, caso específico. ¿Verdad Martí Batres?- y la ausencia de proyecto de izquierda.
“En síntesis, narran quienes estuvieron con él y regresaron desilusionados, les puso tres condiciones:
“1.- Candidatura de unidad.
“2.- Plena libertad (a Lázaro) para integrar el Comité Ejecutivo perredista.
Y 3.- Compromiso de no agresión”.
Como arreciara la campaña de Andrés López, Marcelo Ebrard, Dolores Padiera, René Bejarano y otros, publicamos aquí el lunes 24 de enero:
Lázaro Cárdenas insiste: no va al PRD.
Setenta y seis días después de la primera publicación, los Cárdenas -más Cuauhtémoc que Lázaro- no ven condiciones para resucitar el muerto tendido en la sala de velación Jesús Ortega.
Esa es la realidad.
　
　
EN ESPERA DEL CANDIDATO PEJISTA
　
　
Con todo, quién lo dijera, con esta declinación los ganadores son Jesús Ortega y sus Chuchos.
Ellos controlan los aparatos perredistas y dominan con holgura el Consejo Nacional, donde se toman las decisiones fundamentales.
En su interior se votó elegir al sucesor de Ortega a través de consejeros.
Los Chuchos impulsarán a Jesús Zambrano -el otro Chucho-, en espera de ver por quién se inclina el lopismo.
Decisión difícil, porque nadie aglutina y Alejandro Encinas está predestinado a ser el candidato de la izquierda, eventualmente contra el perredismo aliado con Calderón y Acción Nacional (PAN), y con el respaldo exclusivo del Partido del Trabajo (PT) y Convergencia.
Falta saber, además, si López y Ebrard se ponen de acuerdo en impulsar un anti chucho porque dejar uno de los éstos sería prolongar una dirigencia que “la ha hecho mucho daño al partido”, ratificó ayer El Peje a la par de una exigencia:
-!Que se vayan!