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JUCHITÁN, Oax. 27 de octubre de 2016.-La escasez de lluvia en comunidades del Istmo de Tehuantepec provocó pérdidas en la producción de la flor de muerto de hasta 50 por ciento, reportaron productores de las flores de cempasúchil y cresta de gallo.
La flor de muerto se siembra principalmente en comunidades como Santa Rosa de Lima, Tierra Blanca y Puente Madera, pertenecientes al municipio de San Blas Atempa, así como en terrenos de la población de Mixtequilla y del municipio de Santa María Xadani.
En estas comunidades fueron sembradas más de 300 hectáreas de las flores que se utilizan para adornar los altares para la celebración de Todos Santos.
Los productores reportaron pérdidas del más del 50 por ciento de la cosecha, porque desde el mes de julio cuando iniciaron la siembra, prácticamente no ha llovido y tampoco hay suficiente agua para el riego, ya que la presa Benito Juárez, ubicada en Jalapa del Marqués, tiene menos de la mitad de su capacidad.
De acuerdo con la Delegación de la Sagarpa en Oaxaca, no se tienen datos exactos de cuántas hectáreas se siembran en el Istmo, ni se han cuantificado los daños por la sequía, porque los productores siembran en traspatio y solo durante la época de Todos Santos.
Para los productores, que haya escasez de lluvia representa pérdidas económicas, ya que hay quienes invierten hasta 10 mil pesos por hectárea. Para las familias, esta actividad representa su principal sustento económico en esta temporada.
En los municipios del Istmo, el Día de Muertos representa un encuentro con sus fieles difuntos y para lo cual elaboran altares vistosos que se adornan con estas flores.
La flor de muerto que se produce en estas comunidades, se distribuye en los municipios de Juchitán, Tehuantepec, Salina Cruz y Ciudad Ixtepec, principalmente.