
Masacran a 4 de una familia en Cuajinicuilpa; 3 decapitados
El Instituto Nacional de Migración (INM) realizó un operativo para rescatar a tres adolescentes hondureñas sometidas a trata laboral y sexual en una cantina de Huixtla, Chiapas, y detuvo a dos presuntos tratantes de personas que explotaban a las menores centroamericanas.
Las adolescentes habían sido contratadas para trabajar vendiendo cerveza en la cantina La mariposa traicionera por Wilmert Ponce Escobar, propietario del establecimiento, de nacionalidad mexicana, y por Santa María Rosales, originaria de Honduras y encargada del lugar.
Agentes federales de migración rescataron a una de las víctimas, de 15 años, en el punto de revisión de Huehuetán, cuando viajaba hacia Huixtla con Ponce Escobar, quien aseguró que la menor era su hija. El presunto tratante amenazó al personal del INM que rescató a la joven, por lo que se solicitó el apoyo de la Policía Federal y del personal de la Secretaría de Marina para presentarlo ante la Fiscalía Especializada en Delitos contra Inmigrantes del gobierno chiapaneco.
Posteriormente, en coordinación con agentes de la Policía Especializada adscrita a la referida fiscalía, se realizó un operativo para dar con el paradero de las otras dos menores, quienes fueron encontradas y rescatadas.
Sensible a las difíciles situaciones que enfrentan los extranjeros que llegan al país en busca de mejores condiciones de vida, el Instituto brinda asistencia integral a migrantes víctimas de delitos, otorgándoles visas humanitarias, alojamiento en albergues seguros y apoyo para insertarse en el mercado laboral.
Como parte de esta estrategia, la Delegación Federal del INM en Chiapas entregó tarjetas de visitante por razones humanitarias a tres extranjeras reconociendo su calidad de víctimas de trata y otros delitos. Se trata de dos ciudadanas nicaragüenses de 27 y 30 años, respectivamente, quienes fueron víctimas de asalto y lesiones, y una hondureña de 35 años, sometida a trata de personas.
Las extranjeras recibieron su documento migratorio en presencia del padre Flor María Rigoni, Director del Albergue Belén, y los cónsules de Nicaragua y Honduras, Namibia Fuentes González, y Marco Tulio Bueso Guerra.