Cielo nublado y lluvia entristecen más el Día de Muertos en Chilpancingo
SAN CRISTÓBAL DE LAS CASAS, Chis., 17 de septiembre de 2016. Hombres y mujeres emigran cada vez más a otras ciudades del país, a las maquiladoras, a las fincas agrícolas del norte y a Estados Unidos, por la falta de empleos en la región Altos de Chiapas.
Frente a este panorama, diversos sectores, hicieron un llamado a impulsar fuentes de empleos para evitar que la gente emigre a otros lugares.
Lo ideal es apostarle al turismo para generar mejores condiciones de vida tanto para el patrón como para los empleados, consideró Raúl Alberto Ramos Asencio, Presidente de la Cámara de Comercio y Servicios, CANACO.
Mientras que quienes deambulan de un lugar para otro en busca de trabajo, lamentaron que no tengan otra opción que irse a otra ciudad o terminar aceptando un puesto de taquero.
Recuerdan que muchos que tuvieron la oportunidad de emplearse en la textilera que se abrió en la ciudad, hace unos 15 años atrás y luego fue cerrada, terminaron de taxistas, mecánicos y de vendedores ambulantes.
La situación se torna difícil, aun con una carrera profesional, cuesta encontrar trabajo, porque no hay donde ejercer, este es el caso de Luis Gómez Gómez y Aleida Rodríguez Sánchez, egresados de la carreras de Electrónica y Psicología, quienes tuvieron que “moverse” a la ciudad de México, para encontrar un trabajo, antes que terminar de meseros.
El dirigente de la Canaco dijo “el turismo activa todo el comercio, porque el turismo necesita del servicio comercial, de ventas de productos, alimentos, bebidas, hospedaje, transporte, insumos para la operación turística.
El comercio sería la primera actividad económica de San Cristóbal y lo que sucede con el turismo, es que es un enorme generador de riqueza, porque trae recursos de otros lados, de tal forma que el comercio y el turismo van de la mano, si le va bien al turismo, le va bien al comercio, por eso hay que empujar a que se siga impulsando la actividad.
Ramos Asencio, relató que anteriormente, la ciudad vivía del comercio en primer lugar y del magisterio, ya que muchos maestros vivían aquí y si no trabajaban en comunidades, por lo que se consideraba una plantilla muy importante de trabajadores.
La actividad turística viene a jugar un papel distinto desde hace unos 15 o 20 años, para acá, obviamente que es un generador de riqueza de suma importancia y como centro comercial, San Cristóbal, sigue siendo un atractivo para los 16 municipios circunvecinos que vienen hacer sus operaciones a esta ciudad”.
Por su parte, Guadalupe Liévano, una joven emprendedora quien se ha dado la tarea de unir esfuerzos con productores locales, manifestó que la principal fuente de trabajo es el turismo, sin embargo, solamente salen beneficiados los empresarios, porque los empleados perciben sueldos muy bajos.
Ante esta situación, resaltó que “queremos que San Cristóbal, no solo sea reconocido por el turismo y la cultura, sino que también sea reconocido porque existen personas que quieren crecer y hacer cosas, creadores de productos y proyectos, como lo han hecho con “Casa Naranja”, un espacio donde se promueve una variedad de productos chiapanecos y se ha logrado sin el apoyo institucional.
“La principal fuente de trabajo es el turismo, los recursos que maneja la ciudad son del turismo, pero queremos que se apoye a los productores locales, porque quienes reciben mayor beneficios, son los empresarios, mientras que los meseros, recepcionistas, por citar algún ejemplo, tienen sueldos de mil a tres mil pesos mensuales”.
Los desempleados también indicaron que es urgente crear fuentes de trabajo, a continuación la opinión de Carlos Guillén, quien aseveró “hay mucha gente desempleada que se toma como mano barata y el patrón aprovecha para contratar con bajos sueldos y sin prestaciones de ley.
En la textilera dieron empleo mucho tiempo, pero los malos funcionarios en el gobierno de Sabines, vendieron el terreno y cerraron la fábrica, para instalar la tienda Soriana, por ello, cientos de trabajadores de la región quedaron sin empleo.
En su momento, se dijo que se iban a generar cientos de empleos en la textilera de los Altos de Chiapas, pero ya después, aduciendo que con el progreso se necesitaba una tienda departamental, cerraron la fábrica.