Contención migratoria tiene la solución en frontera sur: Ken Salazar
TAPACHULA, Chiapas, a 16 de febrero de 2015.- Al menos un centenar de servidores públicos del Centro Federal número 15 de Chiapas, bloquearon la entrada y salida de esta ciudad, para exigir la destitución del encargado de ese centro penitenciario, Luis Enrique Sobrevilla Acosta y la coordinadora de los centros federales, Celina Oseguera Parra a quienes acusaron de violar sus derechos laborales y humanos al intentar bajo engaños enviarlos a otras cárceles del país.
Cabe señalar que el Centro Federal número 15, ubicado en el municipio de Villa de Comaltitlán, aún no entra en funciones debido a que el personal está en proceso de capacitación, sin embargo ya están laborando casi medio millar de oficiales, abogados, psicólogos, personal administrativo, entre otros, desde el mes de agosto del 2014.
El vocero de los inconformes, Daniel Romero Pérez, explicó que a raíz de la llegada de Sobrevilla Acosta como encargado del despacho se han registrado múltiples irregularidades como el traslado con engaños de personal a cárceles de Sonora, Nayarit e Islas Marías, violando con ello el acuerdo que suscribió el estado y la federación de no realizar cambio del personal en un tiempo de tres años.
Además ha realizado la rotación del personal sin tomar en consideración el perfil de los servidores públicos asignados de acuerdo a sus habilidades, les ha despojado de sus herramientas de trabajo como radios de comunicación, ha quitado funciones y atribuciones al personal para que supervise y por consiguiente, pida la aplicación y cumplimiento del contrato con empresas prestadoras de servicios, amenazas al personal que no esté de acuerdo y tratado de evitar que se informe de lo sucedido al director de ese centro federal penitenciario que tiene licencia médica, entre otras irregularidades, apoyado por Oceguera Parra.
Los inconformes, en su mayoría jóvenes profesionistas, pidieron dialogar con el Secretario de Gobierno del Estado, Eduardo Ramírez Aguilar para que intervenga ya que temen que seán despedidos por este movimiento o trasladados a otros centros penitenciarios del país.