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LAS MARGARÍTAS, Chiapas, 5 de diciembre 2016.- Un grupo de 30 indígenas tojolabales de la Iglesia Renovación en Cristo, del poblado Gabriel Leyva Velázquez, arribó esta madrugada a la cabecera municipal, después de caminar casi 24 horas entre la montaña, posteriormente de que caciques católicos destruyeran sus viviendas y los amenazaron con asesinarlos, denunció la Coordinación de Organizaciones Cristianas.
Luis Herrera, vocero de la organización, detalló que este martes, hombres, mujeres y niños, llegaron a la cabecera municipal, después de huir entre la montaña, ante el temor de que fueran asesinados por los caciques católicos.
Detalló que el pasado 4 de enero, ejidatarios ligados a la Iglesia católica se reunieron en el centro del poblado, varios de ellos armados, para proceder a destruir las casas de los evangélicos.
Fue entonces que las familias huyeron hacia el monte, ante el temor de ser privados de su libertad después de caminar 24 horas, llegaron el municipio de Las Margaritas para pedir ayuda de las autoridades municipales.
Herrera detalló que desde mediados del 2015, los católicos comenzaron a hostigar a los miembros de la Iglesia Renovación en Cristo, para pedirles que renunciaran a esa denominación religiosa y regresaran al catolicismo.
La molestia surgió, porque en un ejido cercano a Gabriel Leyva Velázquez, en La Florida, un miembro de esa denominación religiosa, estuvo involucrado en un homicidio, individuo que ya fue detenido por elementos de la Subprocuraduría de Justicia Indígena y puesto a disposición de un Juez, éste que dictó sentencia en su contra.
Esto originó que los líderes del ejido Gabriel Leyva Velázquez pidieran a los evangélicos de esa denominación a que renunciaran a su Iglesia, pero al no aceptar, les amenazaron con expulsarlos del ejido, detalló Herrera.
Fue en la mañana del 4 de enero, que los líderes católicos procedieron a destruir las casas de los evangélicos y fue entonces que tuvieron que huir entre las montañas, temerosos de que los asesinaran, hasta llegar esta madrugada a la cabecera municipal.
Los evangélicos se encuentran en el auditorio municipal, donde el ayuntamiento y la Delegación de gobierno, les han brindado atención y alimentos.
En los últimos 40 años, en los municipios de San Juan Chamula, San Cristóbal, Las Margaritas, La Trinitaria, Ocosingo y otros se han registrado casos de intolerancia religiosa, con la expulsión de familias de sus comunidades, sin que los católicos permitan su regreso.