TELEFONO ROJO/José Ureña

TELEFONO ROJO/José Ureña

· Ebrard proyecta el relanzamiento de Delgado

· ¿Arrebatará la candidatura a López Obrador?

· El mensaje de tranquilidad de Rodrigo Medina

No sabe del desvío de recursos públicos para promocionar su imagen.

No sabe quién colocó los espectaculares con su nombre.

No tenía informes sobre los acarreados llegados ayer a la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) para aplaudirle como en los viejos tiempos del Partido Revolucionario Institucional (PRI), los cuales escuecen tanto a su padrino Marcelo Ebrard hasta hacerlo renegar de su pasado priísta.

También ignora el origen de cientos y cientos de jóvenes, quienes lo acompañan a muchos lados y hacen campaña por él para recompensar sus becas.

¿De qué personaje se trata?

Del candidato oficial desde la Jefatura de Gobierno del Distrito Federal (GDF) para candidato del Partido de la Revolución Democrática (PRD) a titular precisamente de esa Jefatura: Mario Delgado.

Del delfín.

Delgado, el secretario de Educación Pública de la capital y quien ayer estuvo en la Asamblea para hablar de la enseñanza pública en la urbe y todo cuanto dice y sabe cabe en tres hojas de apuntes.

POR PUBLICIDAD NO HABRA LIMITES

Sus adversarios le llaman el margen de error.

No pasa, explican, de unos cuantos puntos porcentuales a los cuales puede agregarse otro tanto o anularse, según se muevan las tendencias para arriba o para abajo.

Es decir, no crece.

No ha subido en la apreciación de los capitalinos pese al gran despliegue de publicidad recibido desde cuando Marcelo Ebrard lo mandó a la Secretaría de Educación Pública porque no pudo quitar a Martí Batres, por fin defenestrado cuando criticó abiertamente al jefe de Gobierno por reconocer, retratarse y saludar a Felipe Calderón, a quien desconocía como presidente de México.

Batres no había visto tanto: le faltaba observarlos a ambos en santa alianza con el cardenal Norberto Rivera durante la inauguración de la Plaza Mariana.

Pero esa es otra historia.

Hoy Batres es uno más en la fila de cuadros de Andrés López para saber quién de ellos se enfrentará en la contienda interna de las izquierdas para buscar retener el Distrito Federal para el PRD.

Para ganarse el reconocimiento, la izquierda institucional –Ebrard, Los Chuchos Jesús Ortega y Jesús Zambrano y algunas otras corrientes menores- preparan el relanzamiento de Delgado.

Estamos por ver si, al ser relegado en la lucha presidencial por El Peje, Ebrard es capaz de ganarle la plaza capitalina.

Para ello necesitará un crecimiento inesperado de Delgado y rehacerse de amplios sectores perredistas, a quienes el secretario de Educación hoy desprecia aunque ayer haya pedido el cobijo de los diputados en la Asamblea para no ser engullido por panistas y priístas.

Por publicidad no parará, ya verá usted.

RESPUESTA DE MEDINA A DIPUTADA

El mensaje de Rodrigo Medina estuvo en los hechos.

Su segundo informe de gobierno no tuvo ayer los sinsabores y la zozobra del primero y quienes asistieron al acto, incluido el panista Rafael Moreno Valle, lo captaron al momento.

Medina detalló en extremo cuanto hace sobre todo en materia de seguridad pública con su secuela de datos conmoÇedores: el Tutelar para Menores ha incrementado su población en 240 por ciento en menos de dos años.

De ese nivel es la conquista de niños y adolescentes por la delincuencia organizada.

El gobernador de Nuevo León presentó por la mañana el informe en el Congreso del estado y escuchó las posiciones de todos los partidos con representación legislativa.

La panista Jovita Morín le preguntó si piensa renunciar.

Tal vez por ese antecedente Medina reivindicó su decisión de continuar con su proyecto porque, asentó en el mensaje vespertino, “nada ni nadie nos hará renunciar” a servir a Nuevo León.

La sonrisa de los asistentes al salir –Enrique Peña Nieto, Humberto Moreira, Mariano González Zarur, etcétera- contrastaba con la del año pasado tras el primer informe.