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MARIA DE JESUS PETERS
ARRIAGA, Chis., a 07 de enero.- Bajo un fuerte dispositivo de seguridad implementada por agentes federales, estatales y municipales, se realizó este viernes la marcha denominada Paso a paso hacia la paz para protestar por el secuestro de migrantes, extorsiones, asesinatos, abusos sexuales y el endurecimiento de la política migratoria por parte del gobierno mexicano.
En la manifestación encabezada por los activistas Rubén Figueroa, Elvira Arellano, Irineo Mujica y los sacerdotes del albergue Hogar de la Misericordia y Hermanos en el camino, Heyman Vázquez Medina y Alejandro Solalinde Guerra, respectivamente, los migrantes en su mayoría de Guatemala, Honduras y El Salvador, portando cruces unidas con alambre y mantas de protesta recorrieron las calles de esta población para demandar al gobierno de México que cesen los secuestros y operativos migratorios.
¡Ni una muerte más, ni una masacre más, todos tenemos derecho a emigrar, Migrante aguanta el pueblo se levanta y Paso a paso hacia la paz, eran algunas de las consignas que los activistas repitieron en la caminata que inició del albergue Hogar de la Misericordia hasta la plaza central, la cual fue escoltada por un centenar de efectivos de la Armada de México, policías de Chiapas y municipales.
La coordinadora de Familias Latinas Unidas (FLU), Elvira Arellano denunció que desde hace cuatro días el gobierno mexicano incrementó los operativos en las vías del ferrocarril para detener a los migrantes, quienes tienen que recorrer unos 300 kilómetros de la frontera con Guatemala, internándose por caminos de extravío para burlar la vigilancia policiaca-migratoria donde son asaltados y las mujeres abusadas sexualmente por delincuentes, para abordar el ferrocarril que los acerque a la frontera con Estados Unidos.
Dijo que también efectivos del Instituto Nacional de Migración (INM) y la Armada de México mantienen operativos en la entrada de Arriaga, sobre la carretera y los patrullajes se han extendido hasta los caminos más frecuentes por donde caminan los inmigrantes para llegar a esta localidad.
Arellano consideró que el gobierno de México utiliza todo el aparato de estado para minimizar las acciones de protesta de las organizaciones defensoras de los Derechos Humanos porque no han resulto el secuestro de los 50 inmigrantes de Chahuites, ni ha detenido a los que amenazaron al padre Solalinde Guerra.
Estamos cansados de que nos quieran ver a los mexicanos como verdugos de nuestros hermanos migrantes centroamericanos, aseveró la activista.
En conferencia de prensa, el coordinador del albergue Hermanos en el Camino de Ixtepec, Oaxaca, hizo un llamado a la sociedad civil para ayudar a terminar con los abusos que el crimen organizado y las autoridades comenten contra los sin papeles como parte de una nueva estrategia para su defensa.
Abundó que si la delincuencia se organiza, la sociedad civil también lo puede hacer en red con los medios de comunicación y organizaciones no gubernamentales para que sean los guardianes del camino, junto con los párrocos y sacerdotes.
En su intervención, el coordinador del albergue Hogar de la Misericordia, Heyman Vázquez Medina dijo que con esta manifestación se pretende poner en la agenda nacional el tema migratorio y que el estado mexicano reconozca públicamente que se violan los derechos humanos de los migrantes, además de los secuestros masivos y la masacre que se lleva en contra de ellos.
Por último, el activista Rubén Figueroa propuso que el estado mexicano sea juzgado ante instancias internacionales por las graves violaciones a los derechos humanos que se comenten en contra de los inmigrantes que cruzan por territorio nacional.
Pedimos a los países centroamericanos y organismos nacionales e internacionales que se unan a esta petición, refirió el activista.
En el acto de protesta también estuvieron presentes la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), la organización Protesta Protestando de Puebla, Amorita, de Oaxaca, entre otras organizaciones nacionales e internacionales, así como la Secretaria de la Frontera Sur de Chiapas.
Los activistas informaron que se tenía planeado abordar el ferrocarril para acompañar a los migrantes en su viaje hacía la ciudad de Ixtepec, Oaxaca, sin embargo se podría suspender debido a la falta del tren.
Abundaron que para el día sábado se tiene previsto un acto en el poblado oaxaqueño de chahuites, lugar que ha sido escenario de secuestros masivos de migrantes por parte del crimen organizado.
SI TENGO MIEDO QUE ME SECUESTREN Y ME MATEN.
El guatemalteco Jairo Hernández, de Suchitan, Santa Catarina, dice sentir temor de ser secuestrado y asesinado si su familia no paga por su rescate, pero tiene que corres el riesgo para poder brindarle a su familia un mejor futuro.
Padre de dos hijos de año y medio y un mes de nacido, dijo que la pobreza lo obligó a abandonar a su familia, debido a que los 50 quetzales que ganaba en el campo no le alcanzaban para los gastos.
Relató que sin ninguna complicación llegó a este poblado para abordar el ferrocarril que lo traslade a la ciudad de Ixtepec, Oaxaca, pero va con el temor de que en el camino sea secuestrado.
Si me secuestran mi familia sufrirá mucho y no tendrán dinero para que me liberen, podrían matarme o no se que me harán, dice mientras carga una de las cruces unidas con alambres durante la marcha Paso a paso hacia la paz.
-¿Vale la pena arriesgarse?
Si uno llega allá es otra vida, hay trabajo y mi familia estará mejor, refiere.
El mismo sentimiento de miedo es compartido por su compañero de viaje José chang, de 29 años, proveniente del Quiche.
Sin embargo, dice que se sentiría más seguro si la caravana de activistas defensoras de los derechos humanos los acompañan en su viaje a bordo del tren.
También tenemos miedo de que la migra nos agarre, han estado haciendo operativos en las vías y eso dificultara que nos subamos al tren, refiere.