ESPACIO LIBRE/Alessia Feliciano Mejenes

ESPACIO LIBRE

°COMO HEMOS CAMBIADO!

Cada que alguien me comenta que las PYMES carecen de recursos para realizar planes de mercadotecnia exitosos, me boto de la risa.
Si hablamos de la guerra o mercadotecnia tradicionales, donde dos grandes ejércitos o marcas se enfrentaban entre sí buscando ganar más territorios o mercados, desde luego que las PYMES no tienen nada que hacer en ese campo.
Pero, como las reglas del juego han cambiado, y ahora cualquiera que tenga inteligencia y sepa diseñar una adecuada estrategia tiene muchas posibilidades de éxito.
Para empezar, los grandes mercados se est·n desmasificando: el sistema que los medios convencionales usaban antaño para llegar al público consumidor consistÌa en ubicar a este en un lugar para llevarle hasta ahÌ un c·mulo de mensajes publicitarios.
La gente veÌa TV en sus casas, ahí también oía la radio o leía el periódico en la oficina. Ahora, la masa de la gente que ve la televisión u oye la radio se reduce, cada vez más, año con año: en estos momentos el 85% de todos los aparatos de radio están apagados y otro tanto ocurre con los televisores.
Ser una empresa pequeña o mediana significa tener un nicho de mercado reducido, (que a lo mejor un dÌa puede crecer pero que, por el momento, es chico).
Y cuando los clientes son pocos es más sencillo conocerlos a todos, ubicarlos de manera geogr·fica y preguntarles por que prefieren nuestro producto. Y, a partir de ese conocimiento, es posible corregir fallas, pulir nuestras ventajas y superar a una competencia que a·n insiste en vender con técnicas nada actuales.
Los más recientes estudios realizados por especialistas en mercadotecnia directa, indican que cuesta cinco veces más conquistar a un nuevo cliente, que mantener contento a los que ya se tienen: ahí, con su clientela actual, tienen las Pymes la mesa puesta para iniciar un programa de mercadotecnia exitoso.
Y si sabemos donde están nuestros compradores y lo que ellos esperan saber de nosotros, hacer publicidad efectiva se torna infinitamente más barato.
La televisión abierta es cara, aunque sea local, en cambio, una simple carta enviada a quien le interesa nuestro producto, puede ser mil veces más efectiva.
Si usted, es dueño o directivo de una Pyme, lo felicito: la revolución le ha hecho justicia a través de diversas tecnologías, como la computadora, con las que es posible hacer mucho con muy poco.
El chiste es proponérselo y no dejarse acomplejar por su tamaño: todas las grandes cosas empezaron siendo pequeñas.
El mundo ha cambiado para bien de los pequeños y medianos, ahora todo es cuestión de usted y su inteligencia…