EPISTOLARIO/ARMANDO ROJAS AREVALO

Epistolario

Triste cuadro

Por Armando Rojas Arévalo

CRISTINA: Un amigo recurrió hoy a mí para ayudarle a hacer sus trámites en el programa “65 y más” de SEDESOL. Como mi agenda estaba casi “ful”, le ordené a mi ayudante de muchos años, el ex cabo de segunda “Chiricuto”, a que lo acompañara, recomendándole que no llevara el auto porque encontrar estacionamiento en esa zona –las cercanías de la secretaría de Gobernación- es más que una hazaña épica. Su reporte es el siguiente, sin quitarle ni ponerle porque así fue la jornada:
“Jefe, nos bajamos en la “estación Cuauhtémoc” del Metro, tal y como usted ordenó. Llevaba la dirección de Lucerna esquina con Abraham González, pero no hubo necesidad de preguntar. Seguimos la procesión de muletas, bastones y sillas de ruedas y llegamos a una fila horrorosa que le daba vuelta a dos manzanas. ¡Uta!, cuando lleguemos a la ventanilla a entregar los papeles ya habré cumplido 65 años de edad, exclamé con el perdón de usted.
“Le dije al Don que fuera a investigar, mientras yo guardaba el lugar en la fila. ¿Aquí es para inscribirse en el programa de la pensión para personas mayores?, le pregunté a la ancianita que estaba adelante. ‘¿Se refiere al de supervivencia?’, contestó y no supe qué decir. Mientras, la señora y dos ancianitos más que platicaban con ella, hablaban de sus males: Que las articulaciones me truenan, que las rodillas no me dejan caminar, que el X-Rey no sirve para nada, que qué desgracia fue que hayan quitado el Gerolán de las farmacias, que la planta de los pies me arden, que la próxima semana voy a estrenar silla de ruedas, y cuántas cosas más.
“El Don no regresaba, ya tenía una hora de haberse ido a investigar. Aproveché la espera para preguntarle a la señora de adelante de cuánto es la pensión. De 525 pesos al mes, me dijo, ‘pero hay que venir por ella y por eso estamos aquí’ Entonces, volví a preguntar, ¿no es para registrarse? ‘No, es para cobrar’ ¡Uta y reuta!, volví a exclamar en mis adentros, ¡el Don se ha de haber formado en otra fila! y ni cómo dejar el lugar que le estoy guardando!
“Supuse que la espera iba para largo, así que compré el periódico. Me enteré así que al señor secretario del Trabajo, el licenciado ALFONSO NAVARRETE PRIDA, quien hace guardar y vela por los intereses de la clase trabajadora de este país, lo asaltaron el domingo y los malandros le quitaron su reloj Patek Philippe, modelo Nautilus 572601, que él dice, ahora, tiene un valor de 90 mil pesos (inicialmente informó que 300 mil), pero los que saben de joyería calculan que cuesta medio millón. Pobrecito.
“Me enteré también que el Presidente PEÑA NIETO celebró ayer el primer aniversario de la Cruzada contra el Hambre; que hoy martes viajó a Davos, Suiza, para participar en el 44 Foro Económico Mundial, y que pasado mañana, día 23, será el orador central de la reunión. Mientras, doña ROSARIO ROBLES, la titular de SEDESOL y jefa de todos los empleados que estamos tratando de ver para que informen sobre los trámites, dice que la Cruzada Nacional contra el Hambre (CNCH) tiene como meta este año reducir la pobreza urbana, ya que 36 millones de mexicanos, de los 53 que viven en pobreza, habitan en esas zonas.
“Me entero también que su amigo, el señor Presidente PEÑA NIETO volverá a México el 25 e inmediatamente viajará a Honduras a la toma de posesión de JUAN ORLANDO HERNÁNDEZ como nuevo presidente. De ahí volará a Cuba, donde se reunirá con RAUL CASTRO y posiblemente, visitará a FIDEL, si es que no está haciendo cola aquí como nosotros. También me entero que el 19 de febrero (seis días después de su cumpleaños suyo de usted), OBAMA estará en Toluca para participar en la Cumbre de Líderes de América del Norte. Mientras, los viejitos hablando de sus achaques y los remedios caseros para las dolencias: ‘póngase en la parte que le duele un parche poroso, úntese clara de huevo en las rodillas, el bálsamo Artritón es buenisísimo, la pomada de veneno de abeja es recomendable, y qué se yo cuántos menjurjes más.
“Leo que el gobernador de Puebla, don RAFAEL MORENO VALLE (a quien debería usted pedir le diga la marca del bótox o las pomadas que usa para verse joven), gastó 121 millones de pesos en promocionar su informe en la televisión, y que los paisanos de usted dicen ‘ah, y así atacan a VELASCO COELLO’. No alcanzo a leer lo que dicen de Michoacán, cuando por allá veo que viene el Don echando madres y me dice ¡vámonos, esto valió!’ Que venga yo en la segunda semana de marzo a entregar mis papeles. ‘¿Hay alguna ventanilla especial?’, le pregunto ingenuamente. ¡¡No!!, hay que hacer otra fila, ésa que está enfrente ¡Pa’ su mecha, dije al ver la colona que le daba vueltas a la manzana donde están los negocios que venden partes y accesorios de automóviles.
“De regreso en el Metro le doy una mirada a la Gaceta de la UNAM, donde la doctora SANDRA KANETY ZAVALETA HERNÁNDEZ, compañera académica de usted en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, dice que México es la tierra de los “ricos más ricos” y de los “pobres más pobres”.
“Que México sobresale, también, por sus niveles tan elevados de pobreza, insalubridad, inseguridad alimentaria, exclusión social, violación de derechos humanos y otras situaciones lamentables equiparables a muchas padecidas en las regiones más carentes del mundo. Que entre 2008 y 2010 la población nacional en condición de pobreza, aumentó de 44.5 a 46.2 por ciento (es decir, pasó de 48.8 millones a 52 millones), y sólo 36 por ciento de los habitantes de este país puede decir que viven en la “pobreza moderada”, como si fuera una distinción.
“Que en México, el promedio de escolaridad es de 8.5 años, lo mismo que Zimbahue, Kenia, Sudáfrica, Kirguistán y Palestina. Adicionalmente, 25 por ciento de los mexicanos no tiene acceso suficiente a alimentos, mientras que en Namibia, el índice es de 18 por ciento, en Nepal de 17 por ciento y en Indonesia de 13 por ciento.
“Que otro problema es el de la salud, pues una tercera parte de la población no tiene acceso a servicio alguno de salud –tanto público como privado- y más del 60 por ciento carece de seguridad nacional.
“No importa, digo, ahí está la reforma energética que, de acuerdo a la publicidad en todos los medios, resolverá los graves problemas de México, con empleo, más inversiones, energía eléctrica y combustibles más baratos.
“Dicho lo anterior, le advierto, jefe, si usted me vuelve a mandar a estos menesteres, cómpreme dos pomos de Bengué para el cansancio de pies y un catre para dormir dos días en la calle de Abraham González, mientras nos llega la hora de que nos atiendan. Respetuosamente”.
Sin comentarios.

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