Abanico/Ivette Estrada
MARCELO VA POR EL TRIUNFO EN LA ENCUESTA COMO PLANTEA AMLO.
José Luis Camacho Acevedo.
La lectura inicial y lógica sobre el evento en el que Marcelo Ebrard presentó a sus representantes en los 300 distritos electorales es, sin duda, que, como dicen los clásicos, una muestra de que tiene un bien trabajado músculo político.
Hoy es el día, fue la frase del inicio formal de su proyecto de ser candidato presidencial de Marcelo Ebrard.
Pero el mensaje de Ebrard que pudiera considerarse trascendente con la presentación de sus representantes en los 300 distritos electorales está dirigido al presidente Andrés Manuel López Obrador.
Ebrard manifiesta con esa demostración de presencia territorial que buscará ganar la encuesta a la que el líder del movimiento social que da fundamento a MORENA como partido político, Andrés Manuel López Obrador, apuesta como ratificación de una propuesta de que sea la gente la que decida quien será el próximo candidato presidencial, porque sabe que el tabasqueño ganó la presidencia de la república basado en un histórico trabajo territorial.
Tratar de ganar la confianza política del líder moral de MORENA a través de mensajes mediáticos o de pinta de bardas y otros mecanismos ya muy rebasados de una propaganda que ya forma parte de la historia de la promoción personal, es una equivocación en la medida en que la propuesta de López Obrador para que su movimiento vuelva a triunfar arrolladoramente en los comicios del 2024 sigue siendo ganar el apoyo popular con una oferta clara: estar siempre cerca de la gente para ayudarle a resolver sus problemas más sentidos.
Y Marcelo Ebrard, un genuino compañero de lucha del actual presidente de México desde hace muchos años, conoce perfectamente la intuición de su líder en relación al sentimiento popular que logra que el acercamiento a la gente se convierta, en su momento, en un apoyo electoral reflejado en las urnas, tal y como sucedió en el 2018 cuando MORENA arrasó en los comicios presidenciales.
El presidente de México está decidido a consolidar su lugar en la historia de las democracias mexicanas alentando ahora una integración latinoamericana.
Por ello se han anunciado las visitas que realizará en los meses inmediatos tanto a Perú como a Colombia.
Y en esa cruzada de reforzamiento de la democracia en América Latina, Marcelo Ebrard cumplirá, en su papel de Canciller mexicano designado por López Obrador, un papel logístico y de avanzada ideológica de la mayor importancia.
Ebrard es un político institucional. Su prioridad ahora sigue siendo el apoyar en todo al líder moral de MORENA.
Ser candidato presidencial de un país sin presencia internacional y sin una claridad en sus objetivos sociales como la tiene López Obrador, sencillamente sería tratar de ganar unas elecciones sin atender el mensaje de que, la tarea política realizada durante años por AMLO, es un apoyo prescindible.
Y con su mensaje de que busca ganar la encuesta, como una acción de solidaridad con López Obrador, Marcelo Ebrard está demostrando oficio político y una personalidad de compañero leal y solidario con quien ha ganado la presidencia de la república como resultado de su decisión de estar siempre cercano a la gente.
Los 300 representantes de Ebrard son un ejército comprometido con López Obrador.