Teléfono rojo/José Ureña
Estimado lector, en esta ocasión te comparto mi obra El Vuelo de la Paloma, realizada en la técnica del pastel, sobre papel y que representa la vinculación entre el arte y la evocación de la paz mundial.
El 16 de septiembre de este año en la sede de las Naciones Unidas, en la ciudad de Nueva York, Estados Unidos, se llevó a cabo la celebración por el Día Internacional de la Paz, el tema de este año es: “Pon Fin al Racismo. Construye la Paz” y tiene como objetivo hacer empatía entre las diversas culturas, razas y personas. La lucha contra el racismo es una piedra angular para conseguir un mundo en el que la empatía supere al odio y el miedo a las diferencias entre el género humano.
En el año 2001 se estableció el Día Internacional de la Paz a través de la Asamblea General de las Naciones unidas (ONU), como un día para fortalecer los ideales de no a la violencia y con el objetivo de parar los conflictos armados en el mundo.
La ONU desde su fundación, después de la Segunda Guerra Mundial en 1945, tiene el papel de apoyar a la conciliación de los diferentes intereses entre los pueblos y las naciones. Sin embargo, a veces este precepto queda en un buen deseo. En éste 2022 se contabilizan más de 25 conflictos bélicos activos en el mundo, como el que enfrenta algunos países como: Etiopía, Siria, Afganistán, Palestina, Yemen, Rusia, Ucrania, entre muchos otros.
En los últimos años, la paz en occidente se representa a través de una paloma, generalmente blanca. A pesar de que hay aproximadamente 300 variedades, que descendiente de la paloma salvaje “Columba Livia”. Este símbolo, sin embargo, no es de reciente creación y guarda siglos de tradición.
La paloma en la religión católica representa al espíritu Santo, además simboliza el sacramento del Bautismo, y tiene una connotación de reconciliación ya que después del Gran Diluvio enviado por Dios a la humanidad, Noé lanzó a una paloma para buscar tierra; en el relato bíblico, esta ave regresa con Noe y traen entre su pico una ramita de olivo generando la esperanza de un nuevo comienzo.
La utilización de la paloma como referente mundial de paz, se generó después de la Segunda Guerra Mundial, cuando para el Congreso Mundial por la Paz, realizado en 1949, el pintor Pablo Picasso, realizó el cartel de este congreso y propuso la imagen de una sencilla paloma. La imagen se hizo tan popular, que desde entonces esta representación del ave se fue estableciendo como símbolo del deseo de paz mundial en el colectivo universal.
El artista plástico es un ser privilegiado ya que, en la búsqueda por plasmar los sentimientos y pensamientos internos a través de su propio lenguaje, a veces da forma y crea figuras significantes que traspasan el tiempo y las circunstancias de su misma creación.
La enseñanza académica de la belleza en una superchería. El Arte no consiste en la aplicación de un canon de belleza sino en lo que el instinto y el cerebro son capaces de concebir más allá de ese canon
Pablo Picasso