
Vergonzante ofrenda
VENGANZA DE PALACIO
CONTRA AUREOLES
RICARDO ALEMÁN
Primero las preguntas de rigor:
¿Por qué hasta hoy el gobierno federal decidió acusar a Silvano Aureoles –y a sus principales colaboradores–, del presunto desvío de fondos públicos en su gestión, como gobernador de Michoacán?
¿Por qué la grosera complicidad oficial, por ejemplo, con Cuauhtémoc Blanco –ex gobernador de Morelos acusado de toda clase de latrocinios–, y la repentina persecución de Aureoles y su primer círculo?
¿Será que asistimos a la complaciente y “chabacana” justicia selectiva?
Sí, “justicia” para los leales e incondicionales y todo el poder del Estado contra los adversarios.
¿A quién beneficia el doble rasero utilizado por el gobierno mexicano; rasero que desprende un poderoso tufo de venganza?
Pero vamos por partes.
Está a la vista de todos –y no lo ven sólo quienes cierran los ojos–, el doble rasero que ha utilizado el gobierno de Claudia Sheinbaum frente a las exigencias crecientes del gobierno de Donald Trump.
En primer lugar y ante la amenaza del mandatario norteamericano, de que su gobierno vendría por los jefes de las bandas criminales, la señora Claudia “se dobló” y, de inmediato y ordenó sacar de las prisiones mexicanas a 29 ancianos que, sin más, fueron entregados a la justicia norteamericana.
Lo ridículo del caso es que todos o casi todos los añosos criminales eran, en su momento, poderosos jefes del crimen organizado, pero que hoy no son más que una vieja historia “engañabobos”.
En el fondo se trató de una entrega pactada que no es más que una ofrenda de México al gobierno norteamericano, a cambio de que sea devuelto a nuestro país el aún poderoso Ismael Zambada, “El Mayo”, socio de los gobiernos de Morena en todos los órdenes; federal, estales y municipales.
Luego vino una segunda amenaza de la Casa Blanca; la advertencia de Trump, de que recomendará a las autoridades de su país investigar a políticos mexicanos que se beneficiaron del narcotráfico y del tráfico de personas.
Sí, en cualquier momento el gobierno de EEUU podrá ordenar la captura de “narco-políticos” mexicanos, lo que puso a temblar a todos en Morena.
Por eso, y como por arte de magia, el gobierno mexicano ordenó una repentina purga contra el ex gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles –y su primer círculo de colaboradores–, quien pasó de ser un abierto crítico de los “narco-gobiernos” de Morena, ha perseguido del “narco-gobierno” federal de Morena.
Y por eso volvemos a las preguntas.
¿Quién le tema a que Silvano Aureoles haga público todo lo que sabe sobre los “narco-gobiernos” mexicanos?
¿Quiere, el gobierno mexicano, llevar preso a Silvano Aureoles, para mantenerlo callado?
Y es que aquí no sabemos si el exgobernador, Aureoles, desfalcó las arcas estatales cuando fue gobernador de Michoacán y tampoco si existen pruebas contundentes de tal desfalco
Sin embargo, lo que sí sabemos, es que como no ocurrió en todo el gobierno de López Obrador, Aureoles fue el único gobernador que mostró las agallas para denunciar los vínculos del Partido Morena, con cárteles criminales como los de Sinaloa y Jalisco.
Son públicos los videos, por ejemplo, que muestran los intentos del entonces gobernador, Silvano Aureoles, por entregarle al presidente las pruebas de los “narco-gobiernos” de Morena.
Luego de muchos intentos, la información recopilada por Aureoles llegó a manos de López Obrador, pero qué creen. No pasó nada.
También son públicas las declaraciones del gobernador Silvano Aureoles en el programa Atypical de Carlos Alazraqui, en las que mostró abultados expedientes que en ese momento advertían del asalto el poder político por parte de las bandas criminales.
Así lo advirtió el hoy prófugo ex gobernador de Michoacán: “si no se revierte esta tendencia, de la narcopolítica, el crimen organizado impondrá al próximo presidente o presidenta”.
¿Imaginan si llega a manos de la justicia norteamericana todo lo que sabe Silvano Aureoles?
¿Cuántas cabezas de reputados políticos y gobernantes de Morena rodarían en las cárceles norteamericanas?
Por esa razón, por todo lo que sabe, el gobierno mexicano pretende llegar primero a Silvano Aureoles, para establecer un urgente control de daños.
Sin embargo, el daño para el gobierno de Claudia Sheinbaum ya está hecho y nadie le quitará el título de “narco-gobierno”.
Al tiempo.