El agua, un derecho del pueblo
¿Qué los hace tan voraces?
CIUDAD DE MÉXICO, a 17 de abril de 2017.-SALOMÉ: La detención de JAVIER DUARTE ya es del dominio público, por lo cual no voy a entrar en detalles. Se trata de la crónica de una captura obligada. El PRI pasa por un mal momento y no le convenía para las elecciones del 4 de junio el que siguiera a salto de mata. De aquí a la víspera caerán con toda seguridad ROBERTO BORGE, ex gobernador de Quintana Roo, y CÉSAR DUARTE JÁQUEZ, ex gobernador de Chihuahua, o cuando menos uno de ellos, para recuperar el terreno electoral perdido. Como a JAVIER, a éstos se les tiene localizados.
El Sábado de Gloria es un día que en México tiene mucho simbolismo. Quemar judas es acabar con los diablos, es acabar con lo malo, es limpiar la casa de fantasmas. También es un día que con frecuencia los gobiernos han utilizado para asestar medidas impopulares, aprovechando que todo el mundo descansa y poco le importa lo que viene.
Lo de JAVIER DUARTE no es la quema del judas. Es algo que al gobierno y a su partido le estaba afectando demasiado. Empero, su captura no le alcanzará a beneficiar tanto como se piensa, porque las cartas ya están echadas.
Lo de TOMÁS YARRINGTON es otra cosa. Vendrán implicaciones, por sus vínculos –que ya han sido publicados hasta la saciedad- con poderosos grupos del crimen organizado de aquí y del extranjero. Su captura fue en una operación de policías norteamericanos e italianos.
NO SÉ CÓMO PUEDE HABER gente tan cínica como MIGUEL ÁNGEL YÚNES, quien sin rubor se jacta públicamente de que la captura de JAVIER DUARTE fue gracias a él, y se da el lujo de decir que con eso ya le cumplió a Veracruz. Qué desfachatez.
OTRO, como GRACO RAMÍREZ, gobernador de Morelos, que se cuelga del evento para comentar desvergonzadamente en un tuit: “La detención de Javier Duarte permite acreditar el uso y abuso de recursos públicos en beneficio de un grupo político. No a la impunidad”. Se muerde la lengua. Se ha hablado ya tanto de GRACO, más las denuncias que distintos grupos han hecho en contra de él, que no aguantaría el tabasqueño la más mínima investigación sobre las corruptelas de su gobierno.
SOBRE JAVIER DUARTE y otros íconos de la corrupción mexicana, me pregunto qué es lo que hace tan insaciables a muchos servidores públicos y a sus respectivas esposas tan escasas de sentido común. ¿Qué es lo que hace tan voraz a una persona? ¿Qué es lo que hace tan cínica a su familia, que sabiendo de la depredación que comete él, nadie, absolutamente nadie de sus cercanos sanguíneos, le hace ver el desprestigio que hereda a sus generaciones?¿Hubo alguien que le dijera “ya párale”?
Vemos en las redes cómo esposas e hijos, lejos de guardar prudencia, se solazan exhibiendo mansiones, ricas joyas y viajes deslumbrantes.
Todo el mundo sabe y comenta que la mayoría de los servidores públicos roba, lo cual no es justificable, pero hay quienes se pasan. Los DUARTE se hicieron de inmuebles en México y en el extranjero, que no se conformaron con un rancho con suites, canchas de tenis y golf en Valle de Bravo, sino que se hicieron de otro en Veracruz, donde se localizaron cotizadas obras de arte, de un yate, de un avión, de un helicóptero, de decenas de cuentas bancarias que lavaban el dinero mal habido.
¿Cuándo una persona pierde el piso? Tal vez el pensar que nadie se dará cuenta, o que cuenta con la protección política que le permitirá a su familia y generaciones venideras disfrutar sin congojas de lo robado. Tal vez pensar que no hay quien tire la primera piedra, porque todos son iguales o peores.
¡HAY TANTAS COSAS que enderezar!
Por ejemplo, el daño que está provocando a Morelos, como estado y como pueblo, el problema personal entre GRACO y CUAUHTÉMOC BLANCO. Alguien en el gobierno federal debería poner punto final a este desencuentro que ha traído como consecuencia que se agudice la inseguridad y que la gente viva en la incertidumbre. OSORIO CHONG, del que se dice protege al alcalde de Cuernavaca, debería intervenir.
Los dos tienen la responsabilidad de conducirse públicamente con mesura. GRACO se ha excedido al tratar de sofocar a CUAUHTÉMOC, limitando las aportaciones al municipio para que haga obras, sin reparar que el daño se lo hace a la población. Y lo que es más, las acusaciones de GRACO hacia el ex futbolista de, por ejemplo, tener vínculos con el crimen organizado, y ventilar públicamente las declaraciones del presunto asesino de JUAN MANUEL GARCÍA BEJARANO, presidente de la Feria de Cuernavaca, ocurrido hace unos días a plena luz del día y en una avenida tan transitada como Plan de Ayala, de que BLANCO le pagó 200 mil pesos para matar al empresario, son muy graves y deben ser objeto de la investigación profunda de un tercero.
Peor, que haya alentado a los medios para informar que un juez giró orden de aprehensión contra CUAUHTÉMOC, lo cual fue desmentido posteriormente por el propio juez, raya en lo absurdo.
Si CUAUHTÉMOC es culpable de todo lo que se le culpa, que lo detenga y lo meta a la cárcel, pero valerse de una campaña mediática para defenestrarlo es otra cosa. Es al pueblo que perjudica.
Por otro lado, el ex futbolista también es responsable del desorden y el caos en Cuernavaca. Aprovechando los días de asueto de la Semana Santa, BLANCO fue a Los Ángeles a ver un partido de béisbol entre los Dodger y los Cubs, un equipo de Chicago, cuando la carga turística que se registró en Cuernavaca lo obligaba a estar pendiente de la buena prestación de los servicios.
CUAUHTÉMOC fue también a Toluca para levantar la campaña de ALFREDO DEL MAZO, congraciándose con el PRI y PEÑA NIETO, porque quiere ser candidato a gobernador de Morelos.
OTRO QUE NO SE MIDIÓ fue el secretario general de gobierno de Oaxaca, ALEJANDRO AVILÉS ALVAREZ, quien utilizó el helicóptero oficial del gobierno de Oaxaca para trasladarse con su familia a Puerto Escondido. Ante la denuncia pública tuvo que renunciar al cargo y ofrecer disculpas a la sociedad. También tuvo que renunciar el encargado de la flotilla aérea del gobierno.
EL ASESINATO DEL PERIODISTA sudcaliforniano MAX RODRÍGUEZ PALACIOS vuelve a poner en el tapete de los debates, el tema ¿hasta cuándo? Es de una impunidad grosera. El periodista fue asesinado a tiros frente a su esposa en el estacionamiento de una plaza comercial de La Paz, Baja California. ¡Carajo!