Epistolario/Armando Rojas Arévalo

Me ca..igo de la risa

MARÍAJOSÉ: El 27 de julio presente lo tengo yo, como dicen los corridos. Ese día, el señor que ocupa Palacio dijo que cambiaría la bandera de la “austeridad republicana” por la de la “pobreza franciscana”. Tal propuesta va para la ejecución de las obras del gobierno para evitar los despilfarros; también, me imagino, como estilo de vida de todos los servidores de la llamada “cuarta transformación”.

“Ya vamos a pasar de la fase de la austeridad republicana a una fase superior que es la de la pobreza franciscana…” dijo en “la mañanera”, mientras destacaba que en su administración se ha logrado el ahorro de “2 billones de pesos”.

Esto provoca preguntar en qué se han invertido esos 2 billones de pesos, y dónde, por ejemplo, dónde están los 500 mil millones de pesos que su gobierno iba a obtener para el presupuesto público solo con acabar la corrupción.

Entonces por qué fondos destinados a estimular la ciencia y la tecnología -25 mil 741 millones de pesos- se han destinado a “proyectos prioritarios del gobierno”, según reveló la señora MARÍA ELENA ALVAREZ BUYLLA, directora del CONACyT, al comparecer ante una comisión de diputados y senadores el pasado 4 de agosto.

Justo dos semanas después mandó a su hijo menor a estudiar al Reino Unido. Unas fotografías tomadas en el aeropuerto de Heatrow, Londres, mostraban al hijo menor del presidente documentándose en la clase premier de Aeroméxico, mientras la embajadora de México en el Reino Unido, JOSEFA GONZÁLEZ BLANCO, aligeraba los trámites del joven y hasta la cargaba su mochila de Adidas.

Hace unos meses, concretamente en marzo de este año, quitó o mejor dicho cerró las escuelas de tiempo completo sólo porque fueron creadas por el gobierno de CALDERÓN, donde niños pobres podrían comer. ¿Gobierno para los pobres?

Mira, uno puede usar su dinero en lo que sea y más si se trata de los hijos. Puede uno mandarlos de viajes, comprarles la ropa de marca que pidan, enviarlos a estudiar al extranjero, qué se yo. Los lujos y despilfarros que te permitan los recursos.

Eso de quejarse por estar “fregado” económicamente o decir a tus amigos o conocidos que no te alcanza ni para comer y mandar a la familia a darle la vuelta al mundo o a tus hijos a estudiar a un país caro, es hipocresía.

En el servicio público la decencia y el sentido común te obligan a no usar los cargos y el erario para darse lujos, si haces lo contrario es como si les mentaras la madre al ciudadano de la calle. Algo más: Si dices algo, si pregonas algo, sé congruente. No puedes decir una cosa y hacer otra. No puedes estar en contra del capitalismo y mandar a tus hijos a estudiar a los colegios de alta clase o vivir en países capitalistas.

Si elogias a Cuba, a Nicaragua o a Venezuela, mándalos a vivir o estudiar a esos países. No puedes aventar cotidianamente piedras a las ventanas del capitalismo y echarte a correr, y menos aún pedir refugio o alojamiento en esa casa. No puedes descalificar el conservadurismo, el neocapitalismo, el neo lo que sea, y pedirles “chiches”.

Si dices ser de izquierda, sé coherente. Sé de izquierda. Pegar con una mano y pedir con la otra, más temprano que tarde tú mismo te pondrás en evidencia. De por sí…

Su hijo mayor, JOSÉ RAMÓN, vive en Houston, y los dos hijos que ha procreado con su esposa CAROLYN ADAMS han nacido en hospitales de esa ciudad.

TAMPOCO PUEDES estar burlándote de la Constitución y las leyes. El Tren Maya fue declarado por decreto asunto de seguridad nacional y nadie, absolutamente, ni ambientalistas, ni científicos ni…¡nadie! puede acudir a la ley para parar esa obra abiertamente depredadora del eco sistema de la Península de Yucatán.

Por otro lado, el Artículo 21 de la Constitución se lo pasó por debajo de sus tamaños, al decretar que la Guardia Nacional pase al Ejército. Se olvidó que hace menos de cuatro años, él y su partido hicieron una reforma constitucional para que la Federación contara con una institución policial de carácter civil denominada Guardia Nacional”.

Aun así dice que gobernar con decretazos no es autoritario.

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