Teléfono rojo
El bla bla de la UNACH
Si para definir la rectoría en la Unach es requisito la popularidad, pues entonces el actual rector Carlos Eugenio Ruiz Hernández, es el más popular. Esto gracias a la campaña desatada en su contra.
Es como si los adversarios, en este caso el aún secretario general, Hugo Armando Aguilar Aguilar, le patrocinara su campaña para la reelección. No se necesita ser muy agudo para detectar las plumas del golpeteo mediático, más aún en redes sociales. Y no crea que eso es grátis. En la Secretaria General de la UNACH se solazan mucho en la nómina. Y luego dicen que por qué la máxima casa de estudios de Chiapas está en banca rota. Cierto es que el propio rector ha solicitado ya a la Federacion recursos extraordinarios para hacer frente al quebranto financiero en la UNACH. El Dr. Carlos Eugenio Ruiz Hernández dijo que eran alrededor de 600 millones los que se necesitan para solventar deudas y sanear las finanzas; otros dicen que pasa de los 1,700 millones. Usted no me lo crea, pero son muchos los aviadores en nómina de la UNACH. Se debería dar una sacudida al árbol, aunque Hugo Armando Aguilar Aguilar ya anda ofreciendo a medio mundo que les dará plazas de tiempo completo. Muchos son los ingenuos, los que le creen, porque muchos son los que están ya en la actualidad en la nómina de la Secretaria General de la UNACH. Si se quiere enderezar el barco, por ahí se debe comenzar. Depurando las nóminas de la UNACH. Lo demás es puro bla bla bla. Que si le actual rector pretende reelegirse… la verdad verdadera es que la UNACH tiene muy buenos cuadros académicos de dónde echar mano. Por eso la solución en la UNACH debe ser salomónica: menos grilla y más academia.
Cheque los medios y las redes y verá: apenas asomaron los nombres de José Antonio Molina Farro, Plácido Morales Vázquez, Harvey Gutiérrez Alvarez y Rodolfo Calvo, el susodicho Hugo Armando Aguilar Aguilar sacó sus garras. Y comenzó el golpeteo en los medios contra de los posibles suspirantes. Nadie puede estar por encima de Hugo Armando Aguilar Aguilar, en plena campaña mediática por la rectoría. Presume, eso sí, tener la venia de su cuñado, Ismael Brito Mazariegos. Eso se ha dicho y mucho, pero de lo que nadie habla es ‘de dónde se hizo de mula Pedro’. Es inocultable el enriquecimiento de Hugo Armando Aguilar Aguilar, con acceso ilimitado a la caja chica de la Secretaría General, los diezmos aplicados a cada director de Escuela y Facultad de la Unach. Uno de los negocios más sucios que es un secreto a voces, es el que mantuvo con el director de Medicina, de apellido Solís, y hoy con la actual directora de la Facultad de Medicina, en el cobro de ingreso al preuniversitario.
¿Usted que opina?/revista Jovel.Sclc