Libros de ayer y hoy/Teresa Gil
En las internas del PRI de 2000 para designar al abanderado a la gubernatura, Arturo Núñez Jiménez le dijo a Roberto Madrazo Pintado: “amarra a tus perros“. Y es que el precandidato responsabilizaba al mandatario saliente de los ataques descarnados en su contra en los medios locales.
Ni ese año ni un sexenio después el experimentado político pudo acariciar su máximo sueño, que era despachar en la Quinta Grijalva para coronar una carrera exitosa en el servicio público.
Quizá en 2000 la prensa no fue determinante para que no lograse la nominación, pero sí el veto de Madrazo, que 18 años después vino a revelar que no le dio la candidatura priísta porque su mujer, Martha Lilia López Aguilera, no le convenía a Tabasco.
En 2012 las condiciones cambiaron drásticamente. El PRI dejó de ser un partido hegemónico y la ola social del cambio que se vivió en México dos sexenios antes con el panista Vicente Fox Quesada llegó al Edén.
Hace seis años que los tabasqueños determinaron jubilar al tricolor, lo hicieron asqueados del régimen tricolor y con la idea de que lo mejor para el estado y para el país era el movimiento que encabezaba Andrés Manuel López Obrador; por eso Núñez ganó Plaza de Armas.
Instalado en la Quinta Grijalva, Núñez solía decir que él había llegado al poder “pese a la prensa“.
Por eso desde que era gobernador electo tuvo algunos desplantes, como cuando los reporteros de la fuente le preguntaron sobre su gabinete y respondió que estaba “esperando“ que los periodistas se lo hicieran.
Curiosamente, los actores que a finales de la administración de Madrazo tundieron sin misericordia a Núñez, fueron los consentidos del régimen perredista, gracias a que la primera vocera de la administración, Dolores Gutiérrez Zurita, encabezaba una mesa en la que participaban aquellos.
El no le debo nada a la prensa de Núñez podría tener un enfoque sesgado: si el perredista logró la gubernatura fue por el empuje que le dio a todos los abanderados López Obrador en su segundo intento por la presidencia.
No fue Núñez, pues, si no AMLO el factor del triunfo de la izquierda hace un sexenio. Así que no puede sostenerse que la prensa no pudo impedir la llegada del primero.
El resentimiento por los ataques de 2000, que a decir verdad provino de un sector claramente oficialista, se cree que fue la causa por la que Núñez no cumplió con el pago de la propaganda contratada en los medios por su administración.
La gestión de Núñez quedó a deberle 11 meses a empresas editoriales, pero como el acuerdo había sido un pacto de caballeros, no quedó firmado un documento que le permitiera a la prensa cobrar legalmente el servicio prestado.
PARA SU INFORMACION…
EN EL PRD tabasqueño se quedaron huérfanos. Las críticas al ex gobernador Núñez del aún presidente del partido,Darvin González Ballina, son la mejor muestra de que las tribus no saben hacia dónde hacerse. Por lo pronto ha quedado de manifiesto que el ex candidato Gerardo Gaudiano Rovirosa tampoco podrá quedarse con una rebanada del pastel. Así que el instituto que obtuvo el segundo lugar en los comicios del pasado 1 de julio se encuentra igual de desarticulado que el PRI, que sigue dando bandazos con las declaraciones de su presidente, Pedro Gutiérrez Gutiérrez, quien por más que se esfuerce en atacar al gobierno de Morena, carece de credibilidad. De tal suerte que el nuevo régimen va solo, sin contrapesos, con una oposición enclenque.
TOMELO USTED CON las reservas del caso, pero aseguran que Movimiento Ciudadano en Tabasco está buscando “figuras“ en partidos de izquierda para entrarle a la competencia electoral ante la virtual desaparición del sol azteca.