Contrafilo/José García Segura

No más violencia

Ahora que “los estrategas del conservadurismo” están buscando la forma
de atacar, el presidente Andrés Manuel López Obrador ofreció «amor y
paz» al clero católico mexicano (obispos, presbíteros y diáconos), a
pastores como él y a ministros de otras iglesias.

Seguramente ya se dio cuenta que su política de seguridad no funciona
y para no entrar en conflicto, tomó las de Villadiego.

El presidente dice estar viendo “la mano negra” de los conservadores
quienes quisieran enfrentarlo con los religiosos.

Ante “la barbarie de la violencia” la Conferencia del Episcopado
Mexicano (CEM) hizo un llamado a orar por la paz.

1.- Las misas a celebrarse este domingo 10 en todos los templos del
país serán “en memoria de los sacerdotes y religiosos que han sido
asesinados”.

2.- Igualmente, las misas del mes de julio serán por los desaparecidos
o quienes han sufrido una muerte violenta, “sean homicidios dolosos o
feminicidios”.

Lo que el presidente Obrador no sabe es que su antiguo amigo, el
senador Ricardo Monreal, insiste en corregir el rumbo para que no se
profundicen las diferencias.

“No le conviene al país separarse, no le conviene al país
confrontarse, no le conviene al país polarizarse”.

El coordinador de Morena en el Senado estuvo de acuerdo en que las
asociaciones religiosas están en su derecho de opinar como les plazca.

¡Ninguna de las “corcholatas” presidenciables ha dicho “esta boca es mía”!

Un reporte gubernamental refiere que la mayor violencia se reporta en
los estados de Zacatecas, Guerrero, Michoacán, Sonora, Sinaloa y
Chihuahua.

En paralelo y ante la violencia galopante, Andrés Manuel López Obrador
posicionó a la antigua Policía Federal de Caminos con el nombre de
“Policía de Protección Federal” a cargo de Rosa Icela, la secretaria
de Seguridad Pública.

La Policía de Protección Federal tiene a su cargo ya la seguridad en
instalaciones federales (hospitales, aeropuertos, edificios de
gobierno, instalaciones petroleras…) y en breve operará en los caminos
federales.

El uniforme que otorga la institución (camisa de manga corta hasta el
pliegue del codo, pantalón largo y botas) es similar al de la extinta
PFC

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