Abanico/Ivette Estrada

¡Felicidades Forbes!

La legendaria revista de negocios Forbes cumplió 10 años de realizar foros para develar tendencias en el mundo empresarial. Esta vez optó por inferir el futuro ante  la inflación y desaceleración post pandemia y una conclusión inusitada fue el rol trascendental que juega la gobernanza en los comportamientos de mercado.

En un foro donde se reunieron cuarenta personajes influyentes como Mauricio Schwartzmann (MasterCard), Mauricio Torres (IBM), José Antonio Centeno (CANACINTRA), Eric Pérez-Grovas (AMVO), Carla Humphrey (Consejera del INE), Isidro Quintana (CISCO), Liliana Reyes (AMEXCAP) y Sofía Ramírez (¿México cómo vamos?), entre otros, la gobernanza apareció como una preocupación fundamental en un foro que reunió a líderes empresariales, académicos, funcionarios públicos y periodistas.

Al analizar un entorno de inflación y desaceleración post pandemia, el foro liderado por Roberto Aguilar, director editorial de Forbes, develó que una preocupación crucial es la gobernanza. Se trata de un factor en torno al cual se rediseñará un nuevo modelo económico para México.

Y la gobernanza va mas allá de la democracia y una simulación de participación social, como “indagar” si la población aprueba ampliar la presencia del ejército hasta 2028. Implica las prioridades, establecimiento de acciones y políticas, los valores y el trazar el rumbo a seguir.

En la empresa la gobernanza tiene tres gradientes.  La práctica mínima sólo se limita a establecer medidas de mitigación de riesgos y “no dañar”. Se trata de establecer un gobierno reaccinario más que propositivo. Aborda las vulnerabilidades externas y sus acciones son de filantropía ocasional o donación. El símil es el establecimiento de programas sociales manejados discrecionalmente y con un uso político.

La práctica común de goberanza en el mundo corporativo es establecer esfuerzos sustantivos, en su mayoría fuera de su negocio principal.  Hablamos de dar seguimiento a las principales tendencias que afectan el negociocon planes de contingencia establecidos, así como cumplir voluntariamente con los estándares de sustentabilidad y gobernanza establecidos.

Este nivel de compromiso trata de generar desempeños más allá del promedio de la industria, usar fortalezas para ofrecer mayor valor  y crear una política integral de sustentabilidad. En resumen: estar bien a secas. Pero ¿qué pasaría si los compromisos corporativos de gobernanza fueran más allá?

Hablamos de la integración total de la gobernanza y sustentabilidad en la estrategia y operaciones, el aprovechar fortalezas para cambiar los estándares del sector económico en el que se participa. Implica aumentar el impacto social a través de la innovación, el mercado y las elecciones de los clientes. Es, en suma, vincular áreas de liderazgo claramente articuladas con propósito.

Este nivel superior de gobernanza es que el desarrollo y la sustentabilidad sean los ejes con el que se designan recursos y capital y asegurarse que todos los informes de gobernanza cubran todas las áreas empresariales.

La gobernanza superior es asumir que todas las partes interesadas juegan un rol fundamental en la creación de oportunidades y un mejor futuro. Gracias Forbes por develar aristas que pasaron desapercibidas en los primeros momentos y, que paradójicamente, estaban soterrados en la mente de todos. México necesita gobernanza en un clima de alta incertidumbre y volatilidad como el que enfrentamos ahora.