Observar a la abogacía/ José Antonio Bretón
Contraste: Calderón mandó empleados al PAN, Peña a un operador al PRI
· Los desesperados adelantan dos meses la campaña sucesoria en la UNAM
· Gamboa Pascoe desconoce a Rodríguez Alcaine y pierde… ¡53 diputados!
La crónica de la renovación priísta está escrita antes de sucederse.
Pero cabe una acotación para quienes restan importancia a la decisión presidencial de optar por Manlio Fabio Beltrones luego de haber escuchado a parte de la militancia y medir la imagen de otros prospectos.
Ninguno tuvo la misma aceptación.
Enrique Peña Nieto actuó en sentido inverso a Felipe Calderón.
Cuando Calderón decidió hacerse de Acción Nacional (PAN), ordenó a Juan Camilo Muriño integrar con incondicionales el Consejo Nacional a fin de frenar la reelección de Manuel Espino.
Logrado ese objetivo en la asamblea de León, Guanajuato, todo quedó listo para imponer a un empleado suyo como presidente y nadie como Germán Martínez y/o César Nava.
Les pidió ponerse de acuerdo antes de la elección y el pacto fue simple:
-Sólo uno de nosotros entra a la competencia y el otro se suma.
Así llegó Martínez para fracasar en la elección intermedia de 2009 y luego Nava para repetir derrotas y firmar pactos vergonzantes y generar divisiones de las cuales no se ha podido recuperar el PAN.
De esas tristes dirigencias surgió el liderazgo de Gustavo Madero y la perpetuación de la lucha para impedir el regreso del calderonismo.
Esta actitud de Calderón contrasta con la de Peña, quien escuchó la opción de la militancia priísta y aceptó poner al hombre más indicado en lugar de imponer a un colaborador sin raíz priísta.
Vaya diferencia.
EL COMIENZO DE LA LUCHA POR LA UNAM
Muy temprano, a meses de la convocatoria y más lejos de la elección, ya hay varios precandidatos a suceder a José Narro Robles en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Habrá de todos los colores y no es lejano el riesgo de polarización.
Por ejemplo, el ex subsecretario de Relaciones Exteriores Segio Alcocer es visto como afín al presidente Enrique Peña Nieto, pero otros ligan a Rosaura Ruiz con Andrés Manuel López, aunque tiene currículum propio.
Los críticos del régimen verían con cierta desconfianza a Francisco Bolívar Zapata por estar ligado también a la Presidencia de la República y faltaría ver si hay críticas a Enrique Graue.
Hasta ahora Rosaura Ruiz es la única mujer apuntada y utiliza la equidad de género como una de sus banderas.
¿Pero por qué no pensar en otras interesadas?
Por ejemplo, la doctora Suemi Rodríguez Romo fue finalista en la elección pasada y los miembros de la Junta de Gobierno valoraron con la mejor calificación su propuesta para descentralizar, modernizar y generar nuevos equilibrios para la UNAM.
Desde entonces planteó repensar la Universidad –una especie de presupuesto base cero- y prever retos futuros como las pensiones, bomba de tiempo sobre la cual ha vuelto a llamar la atención Enrique del Val.
Sería interesante abrir el debate para conocer todos los proyectos y saber cuál es el indicado para impulsar la gran reforma académica y administrativa del principal centro de estudios del país.
LA CTM CAE DE 55… ¡A TRES DIPUTADOS!
1.- Como adelantamos aquí, la cúpula cetemista no recordó ayer el décimo aniversario del fallecimiento de Leonardo Rodríguez Alcaine.
No debe sorprender, decíamos aquí, sobre todo cuando su busto fue retirado de la sede de esa central junto con la de Fidel Velázquez para sustituirlos con una estatua de su actual dirigente, Joaquín Gamboa Pascoe.
Si Rodríguez Alcaine se enterara, tal vez no se molestaría porque la Confederación de Trabajadores de México (CTM) ha dejado de ser lo que fue: su secretario general no va congresos estatales y ha suspendido los propios para no molestar al régimen.
La decrepitud cetemista se ve también en la ausencia de posiciones políticas.
Apenas dos diputaciones: la de Georgina Zapata por el único mérito de ser hija del cacique Doroteo Zapata, y Rafael Yarena, dueño de la federación de Jalisco.
Y si el Partido del Trabajo (PT) pierde su registro, favorecería la llegada a San Lázaro de Pedro Alberto Salazar.
Tres diputados cuando llegó a tener… ¡55!
Y 2.- ni modo, no será Ana Lilia Herrera la secretaria general del PRI, pero sí una mexiquense, Carlina Monroy del Mazo.