
Humildad y distinción
l PRI inicia los preparativos para relevar a César Camacho
· No habrá una elección abierta y Peña confirmará su control
· El tricolor cierra la competencia de Colima: triunfó y tan tan
El paquidermo empieza a moverse.
En silencio y con lentitud, como se hacen las cosas ahí, el Partido Revolucionario Institucional (PRI) ya echó a andar la maquinaria para renovar a su dirección nacional.
Dos cargos son los atractivos: la presidencia y la secretaría general del Comité Ejecutivo Nacional (CEN), donde ahora despachan el mexiquense César Camacho Quiroz y la yucateca Ivonne Ortega Pacheco.
Los dos hacen maletas para viajar a la Cámara de Diputados, donde tendrán papeles fundamentales, seguramente la coordinación general y una vicecoordinación del grupo parlamentario tricolor.
Por el ánimo registrado en la residencia presidencial de Los Pinos, cumplieron su objetivo.
Desde hace meses se les instruyó para mantener, por sí y con aliados, la mayoría en la Cámara de Diputados para conservar la gobernabilidad.
Si como dan las cuentas bajo elaboración en el Instituto Nacional Electoral (INE) con base a legisladores de mayoría y de representación proporcional, el PRI mantiene mayoría numérica –la mitad más uno de los legisladores de San Lázaro, 251-, el presidente Enrique Peña Nieto puede estar tranquilo.
Se mantendría la correlación actual y en el Senado de la República el escudero de los intereses gubernamentales es y será Emilio Gamboa Patrón.
NO SE PREVE ABRIR EL PROCEOS PRIISTA
En cuanto a la renovación priísta, la primera duda es escoger un procedimiento.
No será abierto.
En las bases de la convocatoria se mostrarán los objetivos.
A diferencia de diciembre de 2012, cuando solamente existían César Camacho e Ivonne Ortega –uno u otra de presidente-, en esta ocasión todavía hay duda sobre el posible elegido por el presidente Peña Nieto.
Sí hay, en cambio, alguna propósitos.
Se elegirá a alguien capaz de aglutinar al priísmo en base a las nuevas reglas, las surgidas de la elección del domingo pasado, para asegurar una etapa victoriosa rumbo a la renovación del poder federal en 2018.
Dato fundamental:
En 2016 estarán en disputa 12 gubernaturas con sus respectivos congresos y presidencias municipales, tres estados más en 2017 –entre ellas las del estado de México, donde hoy manda Eruviel Avila– y 10 adicionales en 2018 amén de la Presidencia de la República y todo el Congreso federal.
¿Quiénes serán?
Peña Nieto no ha dado luces, más allá del retiro del sonorense –ojo con el origen- de José Encarnación Alfaro con Baltazar Hinojosa, a quien desde ahora se pone en la antesala de la gubernatura de Tamaulipas.
Oficialmente César Camacho e Ivonne Ortega terminan su encomienda el 30 de agosto próximo –antes de esa fecha deberán ser electos coordinador y vicecoordinadora del grupo del PRI en San Lázaro- y, con base a ese plazo, la convocatoria debe salir a más tardar el 30 de julio.
Quienes los sustituyan, dice el politólogo Antonio Meza Estrada, deberán armar un partido triunfador para sobreponerse a una oposición unida y seguramente beligerante.
PERALTA GANÓ COLIMA; PUNTO: CAMACHO
1.- Para el dirigente César Camacho, la contienda en Colima ha terminado.
Ganó el priísta José Ignacio Peralta con 547 votos y el panismo, con Gustavo Madero y Jorge Luis Preciado, deben acatar la sentencia de las urnas.
“Con la ley en la mano y sabiendo que las elecciones se ganan con votos y no con expresiones de otra naturaleza”, Camachoagradeció el voto a favor de su candidato.
Y 2.- uno de los grandes ganadores del proceso electoral es Manlio Fabio Beltrones, quien apostó por Claudia Pavlovich en Sonora y Alejandro Moreno en Campeche.
Con cifras en mano, Beltrones presume un dato más: el control legislativo de los priístas con sus aliados garantiza la instrumentación de las reformas impulsada por el presidente Enrique Peña Nieto.