Libros de ayer y hoy
TELEFONO ROJO
· El gobierno cambia las reglas para funcionarios
· Sustituyen las plazas, pero bajan los beneficios
· Modifican agenda de seguridad por mini informe
El trato para la burocracia ha cambiado.
No porque se hayan modificado normas el inciso b de la Constitución o la Ley de la Administración Pública Federal, por ejemplo-, pues el Congreso de la Unión ha rechazado la reforma laboral.
Sino porque las disposiciones fueron transformadas de oficio de la noche a la mañana.
Si va en detrimento de los empleados, júzguelo usted:
Hasta hace tiempo -2011, verbigracia-, cuando una plaza de buen nivel se desocupaba, era ocupada de inmediato y al nuevo funcionario se le daba un contrato por tres meses.
Después vendría el nombramiento y el empleo por tiempo indefinido.
Sin embargo, a fines del año pasado cambiaron las reglas y los contratos se redujeron primero uno y luego dos meses.
Así han estado vigentes hasta marzo.
Ah, pero a partir de abril esos contratos se darán sólo por un mes.
Con esta disposición quedan claras dos realidades:
1.- El volumen de la burocracia no desciende, se mantiene.
Y 2.- la seguridad es laboral es menor.
Fuentes gubernamentales de alto nivel, consultadas para el caso, justifican con un argumento endeble: se está a fin de sexenio y no se pretende dejar cargas para la próxima administración.
DISPONIBILIDAD PARA CAMPAÑAS POLITICAS
Varios afectados narraron a Teléfono Rojo otros escenarios.
Sus razonamientos:
1.- Así los pueden correr más fácilmente.
2.- No adquieren antigüedad y los consiguientes derechos.
Y 3.- la lealtad de esos servidores públicos está garantizada en caso de órdenes superiores.
Tal vez sean muy suspicaces, pero se ven en campaña y a través de esa incertidumbre se garantiza su participación en apoyo de éste o aquél candidatos.
Tienen como antecedente la campaña del año pasado en Michoacán, donde compitió por el partido del gobierno Luisa María Calderón Hinojosa.
Soldados electorales se vieron y sintieron los mil 800 convocados en julio al Centro Banamex cuando el gobierno los convocó para la única reunión habida de esa índole habida en el sexenio y se lanzó a Ernesto Cordero Arroyo como aspirante a la candidatura presidencial por el Partido Acción Nacional (PAN).
Fue el único orador, además del presidente Felipe Calderón.
Ya no está Cordero Arroyo en campaña nacional porque lo arrasó Josefina Vázquez Mota, pero sí muchos otros correligionarios suyos.
En las campañas se verá cuánto participan no nada más esos burócratas, sino en general los 2.2 millones de empleados de distintas secretarías, organismos descentralizados y empresas paraestatales.
DEJAN PLANTADOS A GOBERNADORES Y ALCALDES
El mensaje presidencial de ayer era prioridad para todo el gobierno.
Todos los empleados federales fueron convocados y todos debieron acudir para dar marco y forma al Auditorio Nacional, como era la instrucción.
Lo lograron.
¿A costa de qué?
En cada dependencia pueden elaborarse inventarios de asuntos desatendidos, citas postergadas, reuniones pendientes, encuentros reprogramados.
Para muchos eran eventos de trascendencia e inclusive de trascendencia para la administración de Felipe Calderón.
Le doy un norte: la seguridad es la marca del sexenio, la epidermis de Calderón y la urgencia nacional de frenar la matanza cuyos números desconocemos, pues el jefe del Departamento de Estados Unidos, Leon Panetta, habla de 150 mil y las autoridades mexicanas refieren en casi 50 mil.
Pues de eso habría encuentros previstos en la Secretaría de Gobernación (Segob).
Fueron confirmados el martes por la noche y por eso llegaron el miércoles temprano al Distrito Federal decenas de alcaldes, gobernadores, secretarios de seguridad pública.
En el aeropuerto los esperaban: el señor Alejandro Poiré y los subsecretarios fueron llamados de Los Pinos y en consecuencia se suspendían esas sesiones de trabajo para fechas posteriores.
¿Para qué los llamaron, entonces?
¿Acaso el martes los titulares de las dependencias de seguridad desconocían el mini informe?
¿Este se organizó de la noche a la mañana?
Se conoció con suficiente antelación.
Sin embargo, acaso por falta de previsión, en las alturas se optó por primar la fiesta del presidente sobre los rutinarios balances de seguridad con su previsible resultado: se reforzarán Guerrero Seguro, Juárez Seguro, Veracruz Seguro y demás seguros inseguros.
La fiesta del presidente era prioridad y todos debieron obedecer.