TELEFONO ROJO/José Ureña

TELEFONO ROJO

· El propio Peña Nieto gestionó el diálogo en el Senado

· Fox y Calderón culpaban al Congreso de sus fracasos

· Camacho Quiroz incorpora a Lepe para Baja California

Imposible ver la fotografía y no recordar los antecedentes.

Desde la semana anterior comenzó a tejerse el encuentro del presidente Enrique Peña Nieto con coordinadores parlamentarios y dirigentes partidistas.

El diálogo giraría sobre el Pacto por México y las iniciativas en curso y las reformas de gran calado pendientes, en especial la hacendaria y la energética para dar larga viabilidad a Petróleos Mexicanos (Pemex).

Más allá de los resultados, el mensaje estaría –y estuvo- en el cambio de política desde Los Pinos.

Así, con una acción, se sepultó el gesto pendenciero de los dos presidentes panistas, Vicente Fox y Felipe Calderón, quienes culparon siempre al Poder Legislativo de sus deficiencias o falta de resultados gubernativos.

Un adelanto del encuentro lo dio el domingo el coordinador priísta Emilio Gamboa Patrón al esbozar inminente encuentro de Peña Nieto con las fuerzas representadas en el Senado.

No se requiere mucho esfuerzo para hablar de la comunicación entre ambos: Gamboa Patrón deslizó lo sucedido ayer.

No pasaron 48 horas cuando se dio.

Al final el hecho tuvo mayor significación porque acudieron priístas –el propio Gamboa Patrón, Manlio Fabio Beltrones y César Camacho-, los panistas Ernesto Cordero, Luis Alberto Villarreal y Gustavo Madero, y los perredistas Miguel Barbosa, Silvano Aureoles y Jesús Zambrano.

LA VISITA DE OSORIO CHONG COMO ANTECEDENTE

La decisión de Enrique Peña Nieto merece marco aparte.

Originalmente se pensaron dos opciones: la residencia presidencial de Los Pinos, como fue costumbre con priístas y panistas, o Palacio Nacional para darle un sello institucional y republicano.

-No –determinó el propio Peña Nieto-. ¿Por qué no me invitan al Senado de la República? Me gustaría conocerlo.

Le dieron gusto.

El gesto tuvo de antecedente la visita inesperada del secretario de Gobernación, Miguel Angel Osorio Chong, el 20 de diciembre.

Y, al igual que Osorio Chong, Peña Nieto programó visitas personalizadas a los jefes de los grupos –Emilio Gamboa Patrón, Ernesto Cordero y Miguel Barbosa- en sus propias oficinas.

Actitud reconocida por todos ellos.

Si alguien lo duda, ahí está el regalo entregado por el perredista Barbosa.

Para la trascendencia quedan el diálogo iniciado y avanzado desde el Poder Ejecutivo con el Poder Legislativo, el compromiso de continuarlo y la promesa de modernizar el entramado jurídico para adaptarlo a las necesidades de un mundo evolucionado.

La contraparte de lo hecho por Vicente Fox y Felipe Calderón, quienes culparon al Congreso de la Unión de su propia incapacidad para ofrecer los frutos ansiados por la transición democrática.

EL PRI ABRE SU ABANICO DE PROSPECTOS PARA BC

César Camacho Quiroz ha iniciado el proceso para seleccionar el primer candidato a gobernador en el régimen de Enrique Peña Nieto.

Es el primer paso en el propósito de recuperar Baja California, la primera entidad caída en manos de la oposición y desde 1989 en poder del Partido Acción Nacional (PAN).

Aquella primera derrota priísta se selló con el reconocimiento de la derrota de Margarita Ortega Villa ante Ernesto Ruffo Appel:

-La tendencia no nos favorece –confesó Luis Donaldo Colosio para iniciar una transición consumada federalmente en 2000 con Vicente Fox.

Debiera ser una decisión fácil.

Todas las encuestas favorecen al Partido Revolucionario Institucional (PRI) sin importar a los principales candidatos: Jorge Hank Rohn, el diputado Fernando Castro Trenti, el alcalde tijuanense Carlos Bustamante y el edil cachanilla Francisco Pérez Tejada.

Las tendencias están en ese orden pero, aquí está la sorpresa, el Comité Ejecutivo Nacional ha decidido encargar al ex diputado Humberto Lepe Lepe.

Dicen en Insurgentes Norte:

-El será el candidato de unidad y se polarizan Hank Rohn y Castro Trenti.

O sea el riesgo de escisión y derrota son reales.

Lepe Lepe estuvo antenoche en la oficina de Camacho Quiroz, quien tiene programada una visita para mañana jueves a Baja California y tratar de generar unidad.

¿Por qué no será una elección fácil?

Los priístas conocen a Guadalupe Osuna, quien por las buenas o las malas impulsará al abanderado panista.

Este, además, llevará el respaldo del perredismo con su santa cruzada por desbancar al PRI en todas las preferencias y en todas las elecciones de 2013.

El abanderado de esta alianza será azul, no lo dude.

Es acuerdo sellado entre el panista Juan Manuel Oliva y el perredista Jesús Zambrano, como hemos dado cuenta aquí en reiteradas entregas.