Teléfono rojo
TELEFONO ROJO
· PAN, PRI Y PRD preparan su respectiva reforma
· Destinos marcados por El Yunque y Los Chuchos
· Confirman a Beltrones , revive Gamboa ¿y Díaz?
Mucho se ha hablado sobre el futuro del PAN, el gran perdedor de julio.
Pero no es el único.
Es increíble cómo la militancia, impelida por El Yunque y Gustavo Madero, ha dado la espalda al grupo del presidente Felipe Calderón y trata de arrebatarle el control del partido.
Los molestos con la derrota lo responsabilizan de los resultados y quieren disminuirle su influencia.
El rechaza culpas y lanza su planteamiento: si fue causante, él puede darle solución.
A juzgar por el pulso de tomado por la dirección nacional panista y reflejada aquí el martes pasado, Calderón no ha encontrado disposición en la mayoría de los 381 consejeros.
Dicho en sentido inverso, son más quienes reclaman un cambio profundo para terminar con la injerencia de gobiernos federal o estatal- en el partido y convertirlo en una fuerza social con estructura propia, militancia activa, organización electoral y formación de cuadros.
Faltan dos fines de semana para ver cómo miden fuerzas ambos grupos antagonistas.
Calderón acudirá como presidente y tal vez sea su última oportunidad de intervenir en el partido al cual presidió y manejó en el sexenio por dirigentes incondicionales.
Madero, El Yunque y su máximo exponente Juan Manuel Oliva tendrán mérito si logran independizar al PAN del gobierno y fuerzan la Asamblea Nacional hasta 2013, cuando realmente determinarán su futuro sin el peso del poder presidencial
EBRARD Y SU LARGA ALIANZA CON LOS CHUCHOS
En el PRD la lucha es diferente.
Viene un realineamiento rumbo al 2018 y todos juegan: Andrés López, Marcelo Ebrard, Miguel Mancera, Los Chuchos, René Bejarano, Manuel Camacho
Con su obcecado rechazo a los resultados electorales y su lucha por revertir la derrota consumada, el tabasqueño trata de sobrevivir para mantenerse vigente y desde esa posición preparar su tercer lanzamiento presidencial.
Ese proyecto de López va en detrimento de Ebrard y Mancera, quienes aspiran a la misma postulación desde diferentes plataformas, el jefe de Gobierno en la conducción del PRD y su sucesor desde la administración capitalina.
Uno y otros necesitan de Los Chuchos, detentadores desde hace años de los órganos del partido y cuyo control no ha podido socavar siquiera El Peje con su poder, sus candidaturas y su popularidad.
Así como en el PAN el respaldo del Yunque puede ser definitivo para la suerte de Gustavo Madero y el rediseño del partido, en el PRD Jesús Ortega y Jesús Zambrano representan la corriente decisiva.
En este terreno la ventaja corresponde a Ebrard.
Los Chuchos o Nueva Izquierda, como quiera llamársele- han sido aliados del actual jefe de Gobierno y se han chocado con López, aunque ahora Zambrano lo acompañe en la peregrina aventura del conflicto postelectoral.
Ellos esperan la definición del Tribunal Electoral para tomar camino al margen del Peje y aumentar su control en los órganos partidistas con nuevos consejeros.
Un adelanto lo tendremos con la definición de los liderazgos parlamentarios, donde Los Chuchos tienen asegurada la Cámara y pelean el Senado con buenas posibilidades.
PRI: CRISTINA Y EL RESURGIMIENTO DE EMILIO
En el PRI también vienen cambios.
Enrique Peña y su equipo nada más esperan el fallo del tribunal para empezar a delinear el nuevo modelo de organización priísta.
Algunas líneas: atar el partido nuevamente a las causas populares con la idea de convertirlo en gestor, formador de nuevos liderazgos y con una estructura electoral fuerte en todo el territorio nacional.
Con el tiempo se definirá su relación con el gobierno de Peña.
Las primeras medidas se tomarán con dirigentes estatales, unos porque se les venció el plazo estatutario Sonora, Guerrero, Oaxaca, Morelos- y otros por los malos resultados de julio: Tamaulipas, Nuevo León
Antes, sin embargo, deberán elegirse a los coordinadores en la Cámara de Diputados y en el Senado de la República.
En el primer caso no hay duda: Manlio Fabio Beltrones estará al frente en San Lázaro y la reunión de elección, programada para el 9 de agosto, será de trámite.
No será el mismo caso en el Senado, donde Emilio Gamboa ha resurgido con fuerza cuando ya todo parecía definido para Cristina Díaz, actual secretaria general del PRI.
Pero hay más interesados.