TELEFONO ROJO/José Ureña

TELEFONO ROJO

· Josefina desespera y la justicia no llega en su apoyo

· La tentación de ir sobre el veracruzano Fidel Herrera

· Nuevos problemas entre Edomex y DF por la basura

Mala suerte del panismo y Josefina Vázquez.

El tiempo se acaba y no están listos todos los golpes previstos en contra de los priístas para derrumbar a Enrique Peña en las encuestas.

Meses y meses –o años y años- no han bastado a los investigadores gubernamentales para integrar expedientes veraces, efectivos e incuestionables sobre blancos específicos.

El caso más viejo es el de Tomás Yarrington.

Desde hace diez años, cuando todavía era gobernador, comenzó una persecución en Estados Unidos y, al compartir información, la PGR comenzó la suya.

Por encargo específico de Vicente Fox, el entonces titular de la SIEDO, José Luis Santiago Vasconcelos, abrió su propia indagatoria.

Como insistiera la agencia antidrogas de Washington (la DEA, Drug Enforcement Administration) ante el propio Fox, se abrió una segunda averiguación.

Yarrington se iba cuando, en confianza, Fox le entregó copias de los dos expedientes pero ocultó un dato: se había abierto otra contra el entonces candidato y seguro ganador en 2004, el también priísta Eugenio Hernández.

Nada se encontró.

Sin embargo, el panismo gobernante no se venció.

NO HA ESCAPADO NINGUN GOBERNADOR

Los esfuerzos por tender sospechas sobre los priístas ha sido empeño constante.

Con un agravante: en algunos momento ellos mismos son víctimas de sus mentiras.

Le sucedió a Germán Martínez cuando como presidente del PAN y coordinador de la fracasada campaña de 2009, se lanzó a hacer acusaciones en espera de consignaciones y órdenes de aprehensión.

Hoy han lanzado a Josefina Vázquez con el mismo discurso porque en esta batalla electoral madre hay el deseo de ir a fondo.

Aquí anunciamos desde marzo la inminente acusación contra Tomás Yarrington en Estados Unidos.

Pero los señalamientos de los testigos protegidos se desvanecen y ahora no podría sostenerse una acusación firme contra el ex gobernador de Tamaulipas.

En México, sin embargo, se han ampliado hacia Eugenio Hernández y otros ex mandatarios estatales, como confirmó en la semana la procuradora Marisela Morales.

Las investigaciones se han extendido y ningún gobernador o ex gobernador del norte del país ha escapado.

Casi podría llamársele operación de rutina.

A estas alturas, cuando faltan poco más de dos semanas para las elecciones, el peligro solamente se cierne sobre Fidel Herrera, quien habría entregado Veracruz a Los Zetas.

Tal vez por ello el candidato Enrique Peña habló del caso y mantuvo su línea de actuación: cada priísta deberá responder ante la justicia por sus actos.

Las sorpresas nunca deben descartarse –y para mejor prueba ahí está el general Tomás Angeles tras acudir a un foro priísta-, pero los cargos no están cuadrados para dar el golpe maestro contra el PRI y Peña.

Tal vez sólo les quede detener a Joaquín El Chapo Guzmán.

SORPRESIVO ASCENSO DEL PRD EN TAXCO

1.- Los problemas por la basura en el Valle de México distan mucho de estar solucionados.

Los alcaldes de los municipios mexiquenses afectados se organizan para exigir estudios técnicos a ver si los nuevos tiraderos no dañan la ecología de la zona.

Los encabeza el edil de Ixtapaluca, Humberto Navarro, quien inútilmente acudió con secretario de Obras del Distrito Federal, Fernando Aboitiz, en espera de respuesta a esta duda.

El problema ya le rebotó al gobernador Eruviel Avila, quien deberá entenderse con el jefe de Gobierno Marcelo Ebrard para evitar dos crisis, una política y otra de contaminación del subsuelo del valle de México en víspera del temporal.

No olvide usted un término: los lixiviados serán noticia como problema o solución, según el logro de Eruviel con Marcelo.

2.- El empresariado del campo, aglutinado en el Consejo Nacional Agropecuario, pronto renovará dirigente.

El aguacatero Benjamín Grayeb Ruiz, actual vicepresidente de Comercio Exterior del organismo, se perfila para suceder a Juan Carlos Cortés, con quien comparte la pretensión de regresar la vista gubernamental al campo.

Ese compromiso ya lo arrancaron al priísta Enrique Peña, puntero en las encuestas y promotor de la autosuficiencia alimentaria.

Y 3.- para el registro: el PAN casi ve su desaparición en Taxco, su municipio insignia en Guerrero.

Hoy la pelea es entre el perredista Manuel Saidí y el priísta Salomón Majul.

La sorpresa es el PRD y en especial Saidí.

Otra cara de la debacle azul.