Teléfono rojo
TELEFONO ROJO
· Peña analiza ir a la asunción de gobernadores
· Mancera, Velasco, Núñez y nuevo federalismo
· DF: gobierno sin ataduras a las tribus del PRD
En los nuevos gobernantes se incuba nuevas formas de hacer política.
Una:
El presidente electo Enrique Peña Nieto está convencido de la necesidad de acudir a la toma de posesión de los nuevos gobernantes de las entidades federativas.
Actitud destacable porque, de mantener su intención, se estrenará como presidente constitucional de los Estados Unidos Mexicanos con un mensaje de conciliación el 5 de diciembre:
Miguel Mancera, titular del GDF, una entidad donde el clientelismo y el PRD se han enseñoreado en perjuicio de las principales fuerzas políticas, el PRI y el PAN.
Tras Mancera asumirá el gobernador de Chiapas, Manuel Velasco, amigo personal de Peña Nieto y quien ya le extendió la invitación respectiva para el 8 de diciembre.
La primera ronda de asistencias se cerraría el 31 de diciembre en Tabasco con otro perredista, Arturo Núñez, acaso el perredista más cercano a Andrés López, el jurado enemigo del futuro presidente.
A diferencia de Mancera, cuya invitación no fue corroborada por colaboradores suyos, Núñez sí ha cumplido con esa cortesía con el sucesor de Felipe Calderón.
¿Por qué no acudían los presidentes anteriores?
Oficialmente se argumentó exceso de trabajo y respeto a la soberanía de los estados, pero se perdió un valor a punto de ser rescatado por Peña Nieto: la fortaleza del federalismo a través de coordinación estrecha.
No tenían 32 días disponibles de los dos mil 190 del sexenio.
BEJARANO, LOS CHUCHOS Y CELADAS A MANCERA
En la capital también vienen tiempos de cambio.
A despecho de cuanto hace Marcelo Ebrard, quien aún promete y compromete recursos del GDF para la próxima administración, Miguel Mancera estudia un nuevo estilo de gobierno.
Parte de un hecho: ha sido el mandatario estatal más votado en la capital gracias a su imagen de candidato ciudadano y eso lo compromete para estar cerca de los capitalinos de manera diferentes a sus antecesores.
El primer signo será alejarse políticamente de las tribus del PRD y sus históricos conflictos internos.
Las dos corrientes dominantes, Izquierda Democrática Nacional de René Bejarano y Nueva Izquierda de Los Chuchos Jesús Ortega y Jesús Zambrano, han querido cercarlo y le han tendido celadas.
La mayor de ella es de los bejaranistas en ALDF, donde se han hecho de comisiones y puestos administrativos a fin de someter a la futura administración defeña.
Mancera ha sido prudente.
Hoy no puede chocar de forma abierta y total porque el jefe de Gobierno todavía es Ebrard, pero a partir del 5 de diciembre estará en posibilidad de rescatar a su amigo Manuel Granados en la Asamblea y empezar a imprimir su sello.
Su independencia del entramado tribal del PRD empezó a manifestarla con el equipo de transición, integrado por gente cercana a él y apartidista, pero la reforzará días antes al presentar a su equipo personal y, en víspera de su asunción, al gabinete del Distrito Federal.
Está decidido a hacerlo todo él, para demostrar control y no formar figuras ni fomentar la especulación.
Otra muestra serán los posibles sobrevivientes: los secretarios de Salud, Armando Ahued; de Seguridad Pública, Manuel Mondragón, y el procurador Jesús Rodríguez si sobrevive al enredo del niño Hendirk Cuacuas, asesinado en Cinépolis de Iztapalapa por una bala divina caída del cielo.
MANUEL VELASCO Y LOS DOS PRESOS HEREDADOS
Signo propio tendrá también Manuel Velasco.
Joven de 32 años, llegará al gobierno de Chiapas sin resentimientos.
En consecuencia, no comprará pleitos ajenos y caracterizará su mandato por trato directo con la gente, la cual guiará sus actos oficiales y su obra pública, y justicia hacia los indígenas.
Y si de justicia se habla, anote desde ahora: someterá a revisión de la justicia la situación penal del ex gobernador Pablo Salazar y el ex zar antidrogras de México, Mariano Herrán.
Dicho de manera precisa: no habrá impunidad, pero tampoco persecución.
DE LOS PINOS A VIRREYES E INFORME DE DUARTE
1.- Si usted quiere saber hacia dónde se cambió el presidente Felipe Calderón hace dos semanas, cuando dejó la cabaña de Los Pinos, búsquelo por el rumbo de avenida Virreyes.
Sí, en Las Lomas, dicen sus nuevos vecinos.
Y 2.- Javier Duarte de Ochoa rinde hoy su segundo informe de gobierno en Veracruz.
Entre los capítulos a destacar hay dos: la seguridad avanza tras la maldita herencia de Zetas y violencia, y la situación económica empieza a superarse a pesar de las difíciles condiciones nacionales.
Resultado: inversión, empleos y asomo a la tranquilidad.
Si los dichos remontan a Fidel Herrera, no caiga en la tentación: El Negro ya es cosa del pasado.