Libros de ayer y hoy
Semáforo
Exal Baltazar Juan Avila
El monopolio del autotransporte en Chiapas.
Verde. Uno de los principales medios de transporte utilizados en la actualidad en todo el mundo es el transporte público, siendo el Metro de la ciudad de México, con mas de 4.5 millones diarios de pasajeros en sus 11 líneas, ocupa el cuarto lugar mundial en número de personas movilizadas, después de los de Tokio, Nueva York y París; a 42 años de operaciones.
El transporte público existe ya desde el principio de los tiempos y puede que desde antes. En el siglo XXIIIIIII a.c. se inventaron los caballos. En un primer momento sólo fueron usados como medio de transporte individual que cada uno tenía que comprarse si lo quería. Pero tiempo mas tarde, con la invención de la rueda, se ideó un método por el cual, atando el extremo de una cuerda al caballo y el otro a varios viajeros, se podía transportar a mucha gente.
Amarillo. Desde tiempos inmemoriales, los medios de transporte público han sido utilizados por los políticos para hacer campaña. Desde el intento de Zapatero de hace una línea de metro directa entre Madrid y Barcelona, hasta el desesperado intento del País Vasco por cortar las líneas aéreas de Madrid a Bilbao.
En el caso del Metro en México, la medida de la huelga es usada por el gobierno, para recordarnos que por muy malo que pensemos que es el transporte público, podría ser mucho peor.
Las huelgas, protestas, marchar o tomas de calles o carreteras por conseguir las famosas concesiones, al menos en el estado de Chiapas, siempre ha significado jugosas ganancias al encargado en turno o al candidato a puesto político de elección popular que tenga un buen padrino, como el caso del delegado de Transito del Estado de Cacahoatan, Cristian N a quien su jefe manifestó que nunca se la ha podido probar nada, por lo que siempre son puras denuncias falsas y es por eso que este delegado a quien se les conoce una trayectoria bastante corrupta continua en ese puesto.
El Congreso del Estado hizo modificaciones a la Ley del Transporte del Estado, le quitan facultades a la Secretaría del Transporte para otorgar concesiones y se la pasan al propio Poder Legislativo, a propuesta de la sociedad y el gobierno, quienes propondrán a quiénes se les otorgarán, con lo que se creara un Consejo Consultivo Ciudadano que se encargará de determinar a quién serán entregadas las concesiones. El organismo estará integrado por funcionarios, transportistas, colegios, cámaras y ciudadanía, quienes determinarán y analizarán las propuestas; el Ejecutivo avalará o propondrá y posteriormente será ratificado por el Congreso del Estado. La Secretaría del Transporte únicamente hará la parte técnica toda vez que será quien realice la recepción de las solicitudes, integre los expedientes y dictamine la procedencia de los mismos.
Rojo. Desde el gobierno del General Absalón Castellanos Domínguez, hasta nuestros días, la venta de concesiones del transporte público y el tráfico de influencias ha sido una constante en Chiapas, aunque los personajes dedicados a la venta de este documento van cambiando en cada sexenio, mismos que utilizan los cargos públicos para hacer de las suyas, engordar sus cuentas bancarias y darse vida de reyes como producto de la corrupción.
En el gobierno de Javier López Moreno, el entonces Consejo Consultivo del Autotransporte del Estado, dependiente de la Secretaría General de Gobierno que encabezaba Pablo Salazar Mendiguchía, y después Rodolfo Ulloa Flores, se comercializaron gran cantidad de concesiones de transporte público en el Estado.
Periodistas, locutores, profesionistas, funcionarios públicos de los diversos niveles, líderes sociales, familiares y amantes de los funcionarios fueron beneficiados con concesiones del autotransporte en sus diversas modalidades, mientras que las viudas, huérfanos, taxistas lisiados por los múltiples asaltos que sufrían y asalariados, jamás fueron tomados en cuenta para obtener una concesión como patrimonio familiar.
Con Eduardo Robledo Rincón, los auténticos asalariados del transporte presionaron para que se hiciera una investigación a fondo, sin embargo después de abrir las sesiones públicas nada se pudo hacer.
En la transición entre Julio César Ruiz Ferro, Roberto Albores Guillén y Pablo Salazar Mendiguchía, las cosas no cambiaron y la entonces Coordinación del Transporte del Estado sirvió para seguir con los actos de corrupción y tráfico de influencias de los servidores públicos que conjuntamente con los líderes del sector se dedicaron a la compra-venta de concesiones a cambio de importantes cantidades de dinero, dándose así una especie de aplicación de la ley e iniciando averiguaciones previas y expedientes penales con sus respectivas órdenes de aprehensión para los involucrados, pero únicamente para calmar las aguas.
Han sido señalados por enriquecimiento ilícito, tráfico de influencias y una serie de delitos: Roberto Javier Fuentes Domínguez, quien fuera coordinador del Transporte en los tiempos de Roberto Albores Guillén, ahora propietario de una cooperativa en Comitán de Domínguez; Chong Kuan, es otro que se ha visto beneficiado con la corrupción en el transporte publico.
El actual secretario del Transporte, el cafetalero: José Tanúz Piñasoria, ha sido severamente cuestionados por presuntos actos de corrupción en la compra-venta de concesiones.