Abanico
Verde. A veces no sabemos cómo expresar los sentimientos para demostrar un afecto o un agradecimiento por las atenciones de amor que nos brindan desde nuestro nacimiento, pero si nos acordamos como en esta vida de nuestra sociedad nos ofrece la posibilidad de aprender cantidad de cuestiones. Nos enseñan a sumar, a conducir un coche, a cocinar, incluso a jugar fútbol. Sin embargo, esta misma sociedad tan preparada para unas cosas no nos enseña ni las mínimas nociones sobre cómo educar a nuestros hijos.
Muchas festividades durante todo el año se dan gracias a la mercadotecnia de los empresarios para incrementar sus ventas, sin embargo la festividad del día del padre, tuvo un inicio distinto. Una breve historia de cómo se llego a dar uno de los acontecimientos que hoy se lleva acabo y que se ha transmitido de generación en generación es la celebración del día del padre. La idea de celebrar el día del padre surgió por el año 1910, y fue encabezada por Smart Dood, una estadounidense que intentaba, de alguna forma, hacer que el papel de los padres en la sociedad fuese destacada.
Dood admiro mucho a su padre que se llamaba William Dodd, un veterano de la guerra civil estadounidense que enviudó al fallecer su esposa mientras daba a luz a su sexto hijo. Sin apoyo de nadie salió adelante para educar y mantener a sus 6 hijos en un racho que su padre tenía al este del estado de Washington.
Smart vio un hombre con una ternura que su intención más grande era de sobresalir con sus 6 hijos, ella deseaba brindarle un homenaje por ese esfuerzo. La primera vez que lo quiso intentar, fue un 5 de junio fecha de su cumpleaños, pero al final no tuvo éxito.
Con paso firme en 1915 decidió volver a retomar el proyecto para darle un día de especial aquellos papas que dan la vida por sus hijos en 1915 el proyecto seguía firme y se sugirió que cada familia celebrase o no el día del padre con toda libertad. Pero fue solo en 1972 que se oficializó el tercer domingo del mes de junio para brindar a los padres. Extendiéndose rápidamente a Europa, América Latina, Asia y África.
Amarillo. La entrevista realizada por Edgar Moreno Jarquin a la psicóloga Tania Hazey Sanchez Ocaña, sobre el tema del día del padre, nos da un panorama un poco distinto, pero apegado a la actualidad.
El titulo que se da actualmente para el padre por ser un día especial, a la imagen ampliamente difundida por las sociedades de consumo, es la de proveedor: aquél que satisface todas las necesidades materiales del hogar. Para que no les falte nada a los hijos trabaja jornadas dobles y aún los fines de semana.
Es difícil logra satisfacer las necesidades presentes, cuando ya le han sido creadas otras. Así se desgasta febrilmente, sin darse un respiro para disfrutar lo importante: la experiencia única de ver crecer a los hijos.
El padre tienen la importancia dentro del núcleo familiar en donde tiene que dar la seguridad, confianza en el porvenir, establece los límites de la conducta infantil, y cierra el círculo del amor que debe rodear al niño. El padre proporciona un elemento único y esencial en la crianza del hijo y su influencia es poderosa en la salud emocional.
Recuerdo que el papá de mi papá tenía la costumbre ser hombre era cuestión de proteger a la familia, expandir el patrimonio, defender sus creencias y honrar a Dios. Era preciso no llorar jamás, tener un bigote espeso y cultivado, porte y tener dignidad.
Ahora tengo presente a mi padre contando sus historias de cómo debe cambiar el mundo o como luchar para que se llevara a cabo, que no se dio cuenta cuando el mundo empezó a cambiar solito, de forma caprichosa y claramente en una dirección diferente de la que el mismo no se esperaba.
Hay cosas que no se olvida me decía mi padre, el fue aplicado y aprendió las nuevas reglas. Se volvió a divorciar y aprendió a ser amigo de la madre de sus hijos. Se adaptó a las nuevas reglas de cómo trabajar con honestidad, en un país regido por reglas hechas por deshonestos, para favorecer a los deshonestos. Aprendió a pedir perdón cuando era necesario y prepararse a recibir a sus nietos adolescentes en su casa y darse la oportunidad de disfrutar lo que en su tiempo perdió.
Los tiempos son difíciles y la experiencia actual de lo que platico es para darnos cuenta que no es fácil ser padre, a un no se si aquellos tiempos de mi padre, la economía era suficiente para mantener una familia grande, hoy la familia es reducida, y al mismo tiempo las necesidades son fuertes.
Rojo. Pero sabemos que no se aprende a ser padre en ningún libro, en la escuela o ir a conferencias, si no lo aprende poco a poco, a base de experiencias y con el tiempo. Lo único que se requiere es ser totalmente responsable, dedicado y dar amor sin condiciones.