Alma Carolina Viggiano Austria/ Quadratín Chiapas
Primera causa de muerte
La salud no lo es todo pero sin ella,
todo lo demás es nada.
Schopenhauer
Cada 29 de septiembre, la Federación Mundial del Corazón conmemora en más de cien países el Día Mundial del Corazón con el propósito de hacer conciencia acerca del grave problema que representan las enfermedades cardiovasculares en todo el mundo.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de muerte a nivel mundial. Tan solo en 2008 murieron 17.3 millones de personas por esta causa, lo cual representa un 30% de todas las muertes registradas en el mundo. Y se calcula que en 2030 morirán cerca de 23.3 millones de personas.
En México, el INEGI dio a conocer que durante el 2007 poco más de 87 mil personas fallecieron a causa de alguna enfermedad del corazón, siendo las personas de 65 años y más las principales víctimas. A su vez, de la población con alguna afección cardiaca, se observa que cerca del 50% de los niños menores de 5 años han presentado enfermedades del corazón relacionadas con alteraciones durante la etapa fetal; 3 de cada 10 niños de 5 a 14 años reportan complicaciones con su sistema circulatorio; cerca del 30% de la población de 15 a 44 años, han sufrido de hemorragia intraencefálica y enfermedades renales por hipertensión, y el 20.5% de la población de 45 a 54 años con alguna complicación cardiaca ha tenido un infarto agudo al miocardio.
Los ataques al corazón y los accidentes vasculares cerebrales o embolias son las enfermedades cardiovasculares más comunes, y los factores más importantes que las producen son la mala alimentación que se basa en el exceso de grasa, azúcares y sal, la inactividad física y el consumo de tabaco y alcohol.
Algunos síntomas que se relacionan con el riesgo de sufrir un ataque al corazón o una embolia son la dificultad para respirar, las náuseas o vómitos, dolor en la mandíbula o la espalda, dolor o molestias en el pecho y dolor o molestias en los brazos u hombro izquierdo.
Para reducir el riesgo de sufrir una enfermedad cardiovascular es necesario realizar actividades físicas de forma regular, evitar la inhalación activa o pasiva de humo de tabaco, consumir una dieta rica en frutas y verduras, evitar las grasas, los azúcares y la sal, mantener un peso corporal saludable y evitar el consumo excesivo de alcohol.
Actualmente en nuestro país se está haciendo un importante esfuerzo por prevenir y reducir el riesgo de padecer estas enfermedades. Seguramente muchos de ustedes han escuchado hablar de la campaña por la salud “Prevenimss», un programa integral de atención a la salud del Instituto Mexicano del Seguro Social que incluye la prevención, curación y rehabilitación. Como parte de este programa se creó la estrategia “Chécate, mídete y muévete», que promueve un estilo de vida saludable y sus beneficios individuales, familiares y sociales. Cuando se trata de nuestro cuerpo y de nuestra salud… más vale prevenir.