Libros de ayer y hoy
ÍNDICE POLÍTICO
FRANCISCO RODRÍGUEZ
CARTA A MANCERA
Don Vicente Ruiz ([email protected]) me hace llegar copia de una misiva dirigida al ex titular de la Procuraduría capitalina que intitula ¿Y de verdad señor Mancera, después de todo esto, aún quiere ser jefe de gobierno?, en la que muy someramente describe las debilidades del proyecto de quien se perfila como candidato del PRD y/o de Marcelo Ebrard.
Dice don Vicente que escuchar hablar al ex procurador de Justicia del DF Miguel Ángel Mancera Espinoza resulta sumamente encantador y, hasta en ocasiones podría decirlo, tranquilizador. Su bien estudiado y aprendido tono de voz, su ya célebre un saludo a ti y todo tu auditorio , sus perfectamente bien articuladas y estructuradas palabras que, aunque en muchas de las preguntas dan respuesta totalmente diferente a lo que esta se refiere, evadiendo la realidad, son tan, y perm
ítame utilizar este término, abogadamente estructuradas, que sin darte cuenta te va envolviendo y casi convenciendo que bien podría hacerte caer en su juego. Sus palabras, su entonación, su aparente calma te hacen pensar que los habitantes de esta gran metrópoli vivimos en Manceralandia.
Y todo esto sería maravilloso si no fuera porque simple y llanamente no es verdad, porque suena vacío, porque hay ausencia de honestidad.
Sería maravilloso si no hubiéramos visto nunca en las noticias de TV o de radio o de la prensa escrita una serie de injusticias que, aunque suene incongruente, han sido orquestadas desde su mando en la Procuraduría de justicia del DF, con la utilización de testigos falsos, calumniando o mintiendo.
Sería maravilloso si no tuviéramos memoria para recordar un sin fin de casos de abuso de poder y de autoridad, de casos de dolor, de injusticia, de violencia, del no respeto a los derechos humanos por parte de la policía, de la inmensa corrupción que apesta en todas y cada una de las áreas que conforman la PGJDF, de la ineptitud que hay en los policías y en todos los impartidores de justicia, sin olvidar por supuesto a los brillantes ministerios públicos y fiscales que hacen gala de ausencia de conocimiento y utilizan su cargo para amedrentar, asustar y volverse ricos a costa de la desesperación y el dolor humano.
Sería maravilloso señor Mancera, si nunca hubiéramos conocido el documental Presunto Culpable en el cual pudimos confirmar lo que se sabía desde hace mucho tiempo y que la verdad, señor Mancera, da asco.
Le pregunto, ¿que no sería mas fácil reconocer que durante su cargo como procurador, se han cometido un sinfín de casos de injusticia que, a todas luces, dejan en claro las deficiencias, los errores, las fallas, la ineptitud, la corrupción que tiene su (ex) dependencia? ¿No sería más fácil, señor ex procurador, pedir perdón a todas esas víctimas que injustamente han sido afectadas en todos sus derechos y expuestas al escrutinio público como grandes delincuentes y mostrados en los medios como lo peor de este país y luego que siempre no?
Y si su miedo a que la falsa imagen que ha construido en los medios no se lo permite, déjeme hacerlo por usted y así, tal vez de alguna manera, todos esos cientos de seres humanos afectados por su procuración de justicia de la ciudad se sientan atendidos y escuchados.
Perdón Mariel por haberte expuesto ante el mundo como cómplice de un asalto y homicidio y gracias a tu comunidad universitaria y al gran apoyo que recibiste de los medios, por lo que no me quedo de otra y mejor te libere.
Perdón Berenice, por no darle la atención necesaria a tu caso y abusar de que sólo tu madre y tú están buscando una respuesta a la inconsolable pérdida de tu hermano desde hace un año, quien durante el festejo de su cumpleaños en un antro de Plaza Loreto fue asesinado, y nosotros evadimos la responsabilidad de investigarlo.
Perdón Charly por haberte acusado de ser cómplice de homicidio en contra de Cabañas, una gran injusticia que te llevó a la cárcel, situación que yo desde el principio sabía no era cierta, pero necesitaba un culpable.
Perdón a La Lore por tenerte en la cárcel aun cuando hace tiempo apareció La Güera, confesa del secuestro que se te imputa.
Perdón a los familiares de Oscar Paredes, testigo protegido por nosotros, por no haberlo cuidado y dejar que lo asesinaran en el bar Bengala.
Perdón a todos y cada uno de los que aún permanecen en la cárcel por haberse robado un litro de leche o algo de comer para su familia, cuando acá afuera sé de muchos, muchos casos de funcionarios públicos y gente de poder que roban a manos llenas y están en libertad.
Y por último, perdón a todos aquellos ciudadanos que durante mi administración se hayan visto afectados y ni cuenta me dí porque, entre mi entrenamiento de tiro, mi libro, y mi deseo de contender para gobernar el DF y andar en entrevistas todo el día, ya no me quedó tiempo para ustedes.
Y a todo esto, señor Mancera, apenas caigo en la cuenta de que tal vez se le cambió el nombre a la PGJDF por procuraduría general de injusticia del DF y yo ni cuenta me di. Siendo así, usted perdone, señor ex procurador.
Y de verdad, señor Mancera, después de todo esto, ¿aún quiere ser jefe de gobierno?
Índice Flamígero: Se desacreditan todavía más las encuestas. La imposición de Miguel Ángel Mancera como candidato de las izquierdas ya estaba pactada con Andrés Manuel López Obrador. La operación de la dupla Manuel Camacho guión Marcelo Ebrard, más que evidente, presionando a los demás contendientes. Lo que importa la expresión popular: nada.
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