Libros de ayer y hoy/Teresa Gil
Para tenerlos contentos
PATRICIA: En una entrega anterior califiqué de “chupa-sangre” a los partidos políticos, porque no representan a la base del pueblo ni luchan y defienden las banderas sociales y solo sirven a los intereses de sus respectivas cúpulas en la repartición de posiciones en el Congreso, ayuntamientos y demás cargos de “elección popular”, despilfarrando los dineros que les otorga la ley en campañas que son una auténtica simulación.
El “proselitismo” para las gubernaturas se inició el 3 de abril y el de diputados y alcaldes empezará del 15 al 30 también de este mes. Las elecciones serán el 5 de junio.
De acuerdo con una excelente investigación realizada por la revista “Vértigo”, para su edición de la presente semana, en las campañas que arrancan esta semana para disputarse doce gubernaturas, 388 diputaciones locales y 965 presidencias municipales en 13 entidades se gastarán el presupuesto del INE de ¡15 mil y medio millones de pesos!, la tercera parte de lo que MIGUEL ÁNGEL MANCERA está solicitando al Presidente para renovar el parque de unidades del transporte público en la Ciudad de México para aminorar la emisión de contaminantes en la urbe y atenuar la contingencia ambiental.
Independientemente de esa cantidad que el INE tiene dispuesta, los 13 institutos electorales locales disponen de un presupuesto superior a los 5 mil millones de pesos para la operación de cada uno de ellos y gastos de campaña.
En suma, 20 mil millones de pesos serán destinados a las jornadas en Baja California, Aguascalientes, Chihuahua, Durango, Hidalgo, Oaxaca, Puebla, Quintana Roo, Sinaloa, Tamaulipas, Tlaxcala, Veracruz y Zacatecas, en tiempos de problemas económicos en todo el país que han obligado al gobierno a reducir el gasto corriente y modificar el programa de obras sociales. La austeridad no llegó a los partidos.
Ningún país gasta tanto en elecciones como México. Por ello, los comicios de este año están considerados como los más caros del mundo.
El dispendio sólo se explica por la necesidad que tiene el gobierno de mantener contentos a los partidos y estén de su lado cuando los requiera. Pero la democracia no requiere de tanto gasto ni tanto aparato.
Aparte del despilfarro que se hace en los partidos parásitos, el INE arrastra un burocratismo excesivo, insultantes emolumentos a los consejeros y demás funcionarios los y ostentosos inmuebles en que despacha.
Las campañas se caracterizan por los acarreos de ciudadanos, a los que se les regalan todo tipo de cosas: desde las tortas o “refrigerios” hasta playeras, chamarras, mochilas y útiles escolares para sus hijos, paragûas, lámparas, impermeables. Morrales para el mandado y demás objetos que luego son arrojados a la basura.
Lo más odioso de estas jornadas es lo que se le denomina la “espotisa”, o sea la emisión de mensajes por radio y televisión que son un ultraje a la inteligencia humana y limitan los espacios para la libertad de expresión.
Los partidos tienen desde 2007 el monopolio de los spots sin costo para ellos, porque son tiempos que proporciona el Estado por ley. Por ejemplo, en 2015 fueron un total de 16 millones 174 mil 80 spots que se difundieron por dos mil 500 estaciones de radio y televisión entre el 5 de abril y el 4 de junio, tiempo en que se celebraron las campañas federales electorales. En conjunto, durante las etapas de precampañas, intercampañas y campañas se transmitieron por radio y televisión 39 millones 87 mil 360 mensajes de propaganda. De los 48 minutos de tiempos oficiales del Estado, durante campañas federales, a los partidos políticos les correspondieron 41 minutos y los restantes siete para uso de las autoridades electorales.
Todo esto eleva el nivel de hartazgo de la ciudadanía y agudiza el enojo y la impotencia social porque no hay forma de detenerlo. No hay más que tres opciones: El voto de castigo, votar por los candidatos independientes sin importarles quienes sean, sólo por el hecho de llevar la contraria a los partidos, y no votar. O votar por los mismos de siempre.
DE OTRAS COSAS, todo el mundo se pregunta cuáles fueron las razones por las que el Presidente PEÑA NIETO decidió sacar a MIGUEL BASAÑEZ de la embajada de México en Washington. La razón es muy sencilla: BASAÑEZ no estuvo a la altura de las circunstancias. No contestó ni a título personal y mucho menos como embajador, ya no se diga sutilmente, el alud de ataques de TRUMP a México. El representante se mostró inconmovible ante esa circunstancia donde se requería mostrar contundencia. Claro, habría que decir en su abono, que todo embajador depende de la línea que le tiren de la cancillería.
A ALEJANDRO MURAT, candidato del PRI-PVEM-PANAL al gobierno de Oaxaca, lo descobijaron. EVIEL PÉREZ MAGAÑA, el senador que fue designado como coordinador de su campaña, ha sido nombrado subsecretario de Sedesol y en este sentido ya no podrá estar con aquel. Muchos interpretan esto como una señal de que MURAT no las tiene de todas, todas.
LOS 33 MEXICANOS señalados en los “Papeles de Panamá” (Panama Papers) son ya investigados por el SAT. ARISTÓTELES NÚÑEZ, director de esa entidad, dice que todos los capitales que sacaron del país hace muchos años -incluso décadas- podrían retornarlos al país, pagar impuestos y tendrían la opción de solicitar una condonación o tener la condonación de la actualización, del recargo y de la multa, siempre y cuando sus capitales sean de procedencia lícita. Claro.
NADA QUE LOS PERITOS del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes rompieron con la PGR y regresan a casa. El conflicto tuvo su origen en que la PGR dio a conocer los resultados del peritaje en el basurero de Cocula sin avisarles. Es falso que no estuvieran presentes en la presentación de este peritaje por decisión propia, dijeron, e insistieron que ni siquiera fueron notificados. Con anterioridad advirtieron a la PGR de que “no se podía hacer una comunicación pública de algo que es provisional”.