Proponen a Claudia Espino para la Secretaría Ejecutiva del INE
CIUDAD DE MÉXICO, 31 de octubre de 2019.- Al celebrar el fallo de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) que revocó el acuerdo del padrón electoral de Morena, el aspirante a la dirigencia nacional del partido, Alejandro Rojas Díaz-Durán, buscará una reforma estatutaria profunda en un próximo congreso nacional, a tiempo y en forma de cara al 2021.
En conferencia de prensa, el senador suplente de Ricardo Monreal fijó su postura sobre la anulación del proceso de elección de Morena y dijo que las reformas del partido ya quedaron rebasadas por la realidad, pues fueron redactadas con el objetivo de llevar a Andrés Manuel López Obrador a la Presidencia de la República.
El contendiente a la dirigencia nacional de Morena se congratuló del triunfo del TEPJF, pues consideró que es una victoria de las mejores causas al avizorar prácticamente el naufragio de este instituto político que, aseguró, se encontraba secuestrada por una nomenclatura que hizo que el partido no fuera democrático e incluyente.
Este miércoles, el máximo órgano judicial en material electoral resolvió que no pueden ser excluidos del padrón, militantes de Morena que cumpliendo con los requisitos se registraron después de 20 de noviembre de 2017 y consideró que no tiene valor la convocatoria que emitió el instituto político para elegir a su dirigencia nacional.
Acompañado del abogado Jaime Hernández Ortiz, quién había diseñado la estrategia jurídica claves para dichos fallos al partido, Alejandro Rojas planteó la instalación de una mesa por la unidad democrática de Morena entre los que aspiran a la dirigencia para llegar a acuerdos.
«Tenemos que hacer un planteamiento y salir de esta crisis en la que nos han metido, por ello se requiere voluntad política”, subrayó.
En otra de sus cinco propuestas, buscará iniciar una campaña nacional de credencialización y afiliación y reafiliación a nivel nacional durante 90 días, en plazas públicas, por internet, y aplicaciones, para que los 10 millones de morenistas estén debidamente acreditados.
Esta propuesta la ve como un valor simbólico al recoger de la militancia el interés de tener un documento que acredite que «Juntos Hicimos Historia» con el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Para ello, dijo que los mil 600 millones de pesos que están en Morena, se deben invertir para tener un padrón confiable y concreto.
El aspirante a la dirigencia nacional de Morena propuso que haya tres debates en noviembre entre los contendientes, uno en el Norte del país, otro en la región Centro y el último en el sureste de México, para los militantes tengan claro los criterios para distinguir y contrastar quiénes son, sus trayectorias y propuestas políticas.
Una vez pasados los tres debates, ideó la aplicación de tres encuestas en diciembre para equiparar y tener piso parejo, una que sea organizada por el Instituto Nacional Electoral (INE), otra por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y la última por encuestadora con prestigio internacional para que no haya dudas.
Y pidió la renuncia de Yeidckol Polevnsky a la presidencia de Morena para que no sea juez y parte, así como Bertha Luján, quienes ya no pueden reelegirse para el cargo, al igual que Mario Delgado, como un acto de congruencia y compromiso democrático.