Así proyecta observadora de la ONU la era Trump para Latinoamérica
CIUDAD DE MÉXICO, 23 de diciembre de 2022.- A horas de llegar a México tras ser expulsado de Perú, el Embajador Pablo Monroy participó en la conferencia matutina del presidente Andrés Manuel López Obrador desde Tabasco.
Al reconocer que los retos que enfrentó la Embajada de México en Perú no fueron fáciles por la situación política que se vive en ese país sudamericano, Pablo Monroy aseguró que se cumplieron tres objetivos prioritarios siempre apostando al diálogo.
“Logramos estos objetivos con la firme convicción y apostando siempre a la diplomacia y al diálogo como herramientas, como medios para manifestar las preocupaciones que tenemos, manifestarlas de manera respetuosa y sin intervenir en los asuntos internos, pero no dejar de manifestar preocupaciones legitimas que se tienen sobre una situación política como la que sucede en Perú y tratar de resolver aquellas diferencias que pueda haber”, señaló.
Pablo Monroy enumeró tres retos principales que enfrentó desde el pasado 7 de diciembre, cuando Pedro Castillo fue destituido como presidente de Perú.
Señaló que de manera prioritaria, la Embajada veló por la seguridad de todas las personas mexicanas en Perú; desde el 7 de diciembre, todo el equipo de la Embajada estuvo pendiente en todas las ciudades.
Informó que se habilitó un registro sobre cuántos mexicanas estaban en el país, con más de 500 personas mexicanas registradas y más de la mitad en la zona de Cusco.
El segundo objetivo de la Embajada tras los sucesos, fue honrar la larga tradición de asilo políticos de México para aquellas personas que teman por su vida.
“Así lo pudimos hacer, como saben, Pedro Castillo solicitó asilo, pero fue capturado previo a que pudiera llegar a la Embajada, pero pudimos resguardar a su familia”, indicó.
Como tercer objetivo, Pablo Monroy mencionó que fue mantenerse atentos al desarrollo de la situación política en Perú y mantener los diálogos abiertos.
“Estoy convencido de que estos tres objetivos los hicimos uno, sabiendo que somos funcionarios públicos y nos debemos a nuestros ciudadanos , que esa es la razón de ser de nuestra función; dos, honrando esta tradición de sentido humanista de México de proteger a personas que se encuentran en situaciones d riesgo y sobre todo sabiendo que en una situación como la que atraviesa Perú es muy importante proteger a estas personas, sobre todo cuando México considera sagrada también el principio de presunción de inocencia”, agregó.
Por su parte, el presidente Andrés Manuel López Obrador calificó como un orgullo la declaración de persona non grata al Embajador de México en Perú.
“Es un timbre de orgullo que se le declare persona non grata a nuestro embajador Pablo Monroy por cumplir la misión de salvar vidas y hacer valer nuestra política exterior«, dijo.