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MARIA DE JESUS PETERS
ARRIAGA, Chis., 24 de noviembre.- Un grupo de mareros golpeo a un migrante centroamericano y creyendo que estaba muerto lo fueron a tirar en la entrada del albergue Hermanos en el Camino, ubicado en Ixtepec, Oaxaca, que dirige el sacerdote Alejandro Solalinde Guerra, quien se encuentra amenazado de muerte junto con el encargado de ese mismo refugio, Alberto Donis.
La acción fue tomada como una intimidación de lo que le puede pasar a ambos defensores de los derechos humanos de los migrantes, por lo que, organismos como Amnistía Internacional y representantes de las casas de migrantes de la iglesia católica han solicitado al gobierno de México se tomen las medidas pertinentes para evitar un atentado contra ellos.
Solalinde Guerra denunció con anterioridad la presencia de integrantes de la Mara Salvatrucha 13 y Barrio 18 en el corredor por donde transita el ferrocarril que inicia de este municipio hasta Ixtepec, en Oaxaca, donde ya se registran asaltos y violaciones ante la falta de vigilancia de las autoridades de ambos estados.
De acuerdo a denuncias de los migrantes, los pandilleros ya se dividieron el territorio y están operando con grupos de traficantes de personas en Arriaga e Ixtepec.
Según el salvadoreño Maynor Cifuentes, el este municipio, ubicado a unos 300 kilómetros de la frontera con Guatemala, opera la pandilla Barrio 18, liderado por un centroamericano apodado Mano Negra, quienes han tomado el control de algunas colonias.
Mientras que en Ixtepec, Oaxaca, operan una veintena de integrantes de la Mara Salvatrucha 13, encabezado por su líder apodado La Calaca, quienes mantienen atemorizados a los sin papeles que van en busca del sueño americano.
Se ha denunciado que los mareros también operan en contubernio con organizaciones delictivas dedicas a secuestrar y extorsionar a migrantes.