Aprehenden a presunto asesino del periodista Mauricio Cruz
Gabriela Coutiño
Tuxtla Gutiérrez, Chis. 19 Agosto.- En flagrancia, la Fiscalía Especializada en Delitos Cometidos en Contra de Inmigrantes rescató de un bar en el municipio de Ciudad Hidalgo, ciudad fronteriza con Guatemala, a una menor de 15 años víctima de Trata de personas.
La menor fue localizada en un operativo encubierto que llevaron a cabo policías y un fiscal del ministerio público anti-trata en la cantina Selene; dos mujeres implicadas en el enganche y explotación de menores fueron detenidas, informó la dependencia.
La joven de origen guatemalteco era empleada hasta por 12 horas diarias por lo que recibía un pago mínimo, y para que no fuera a escapar, era vigilada por una de las mujeres arrestadas al habitar en la misma vivienda, de la que no podía salir sin compañía, indicó la Fiscalía.
Fue su compatriota Lidia Chávez, quien se habría encargado de conquistarla en la frontera México-Guatemala y trasladarla al burdel donde había acordado con Angélica Monzón Carrillo la contratación de la víctima para mesera, actividad en la que era obligada a fichar con bebidas embriagantes con clientes que pagaban una cuota a la caja, aseguró la Fiscalía.
La Fiscalía Especializada en Delitos Cometidos en Contra de Inmigrantes del gobierno de Chiapas, informó que mantiene operativos furtivos a bares y cantinas en los municipios fronterizos con Guatemala donde menores centroamericanas son prostituidas.
La menor rescatada está siendo atendida por personal especializado de la dependencia, donde se le comprobó daño emocional a través de valoraciones médicas, sicológicas y pruebas periciales; por lo que fue canalizada a un refugio donde se continuará con su recuperación.
La semana pasada, en otro bar El Cangrejito playero, en Tapachula, también fueron liberadas tres menores de edad, dos de 14 años y una de 13, quienes eran obligadas a laborar jornadas que alcanzaban las 12 horas continúas, sirviendo cervezas y fichando con clientes.
Según el fiscalía de Migrantes de Chiapas, la explotación sexual de inmigrantes en ciudades fronterizas con Guatemala, es un problema que tratan de resolver, pero se dificulta porque muchas víctimas no denuncian su caso ante las autoridades por temor a represalias.