J Balvin, Marshmello, Armin van Buuren y Julión, en el FIG de León
CAFÉ PARA TODOS
ALBERTO CARBOT
* MÉXICO, ESPIADO POR EU; TIBIA REACCIÓN DEL GOBIERNO
* TAPACHULA, UN GUETTO DE RWANDA EN EL SUR DEL PAÍS
Por si fueran pocos los agravios que México sufre cotidianamente de parte del gobierno de Estados Unidos, ahora se sabe que la embajada nuestra en Washington fue objeto de espionaje de parte de agencias de inteligencia del país vecino.
Documentos filtrados por Edward Snowden, el ex contratista de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) de Estados Unidos -quien actualmente se encuentra en algún lugar neutral del aeropuerto de Moscú, huyendo del gobierno estadounidense, tras pasar unos días en una especie de refugio en Hong Kong-, revelaron que nuestro país fue objeto de estas acciones de fisgoneo.
Pero no sólo México fue blanco de estas maniobras de escucha. Según reportó el diario británico The Guardian, también las representaciones de Japón, Corea del Sur, India y Turquía en Washington fueron objeto de las actividades de espionaje estadunidense.
Sin duda, se trata de una nueva intromisión como las que estamos ya acostumbrados en México. Si a países poderosos como Japón, Rusia y China los espía Estados Unidos, qué se puede esperar de nuestro país, que es una nación de mucho menor poderío, por más que siempre se nos quiera incluir en las listas de los más ricos e influyentes.
Ante estas denuncias -que por supuesto suenan muy creíbles-, el gobierno mexicano se ha mantenido muy cauteloso y hermético. Parece que al gobierno le da miedo reaccionar ante lo que haga el Tío Sam, no vaya a ser que se enoje y nos castigue con el látigo de su desprecio.
Sin mediar ningún comunicado y sólo a través de algunas declaraciones emitidas de manera casi extraoficial, el gobierno mexicano señaló que está consciente de las informaciones sobre un supuesto espionaje de que fue blanco su misión en Washington por parte de Estados Unidos y ha entablado comunicación con las autoridades de ese país.
Se ha establecido comunicación con el gobierno de Estados Unidos de manera directa y con la celeridad que el tema merece, dijeron este lunes fuentes de la Cancillería, y admitieron que desconocen cuáles sedes diplomáticas o funcionarios del gobierno mexicano habrían sido afectados. Sin embargo, señalaron que tales temas serán tratados con el gobierno estadounidense.
Los informantes de la Secretaría de Relaciones Exteriores indicaron que el mismo presidente Barack Obama expresó públicamente su intención de proporcionar la información necesaria en torno al asunto.
Hay qué decir que estas denuncias sobre espionaje a México no son nuevas. En 2004, el entonces embajador mexicano en Naciones Unidas, Adolfo Aguilar Zínser, denunció haber sido espiado junto a representantes de otros países que buscaban evitar la invasión de Irak.
En su momento, Aguilar Zínser -muerto en un accidente automovilístico en Tepoztlán, Morelos, en 2005-, afirmó al diario The Observer, que un funcionario estadounidense se le acercó para decirle que su propuesta no contaba con el apoyo de su país, pero se trataba de negociaciones secretas que se supone no debían conocer los norteamericanos.
Fue una señal de que Zínser y otros altos representantes extranjeros ante la ONU eran objeto de espionaje. También se sabe que durante la negociación del Tratado de Libre Comercio de Norteamérica (TLC), que entró en vigor el 1 de enero de 1994, el gobierno canadiense espió al mexicano.
El ex embajador de México en Washington, Arturo Sarukhán, admitió también que sería ingenuo pensar que los estadounidenses no espían a los diplomáticos mexicanos.
Curiosamente, el pasado domingo -mientras nuestro país se muestra timorato en torno a las denuncias-, la Unión Europea y los gobiernos de Alemania y Francia, en tono enérgico exigieron explicaciones a las autoridades de Estados Unidos.
Como respuesta, la oficina del director de Inteligencia Nacional de EU emitió una nota donde afirmó que el gobierno de su país no hará comentarios públicos sobre el tema y que responderá por los canales diplomáticos a los países presuntamente involucrados.
TODOS LOS DÍAS ESPÍAN A LA GENTE, ARGUMENTAN LUCHA CONTRA EL TERRORISMO
El tema surge justamente en momentos en que se ha denunciado que autoridades de Estados Unidos y hasta británicas espían todos los días a sus ciudadanos y se han metido hasta la cocina de los estadounidenses, preocupados de que alguien pudiera estar organizando alguna actividad terrorista en contra de sus intereses.
El propio gobierno de EU se vio obligado a aceptar que realiza por motivos de seguridad una operación de monitoreo a gran escala de las comunicaciones telefónicas de millones de ciudadanos, desatando enconadas reacciones de grupos de defensa de los derechos civiles y a la privacidad.
El portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest, dijo que Obama se congratula por el debate público acerca del balance entre libertades civiles y seguridad, pero está decidido a usar todas las herramientas disponibles para mantener seguro a Estados Unidos.
En otras palabras: ya se dieron cuenta que estamos espiándolos, pero no se preocupen, no dejaremos de hacerlo. Parece que esas expresiones no coinciden con el concepto que tenemos de Obama como un hombre defensor de las libertades civiles.
El diario británico The Guardian informó que se ordenó al operador telefónico Verizon proporcionar diariamente a la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) información sobre todas las llamadas telefónicas en su sistema, tanto dentro de Estados Unidos como entre éste y otros países.
El periódico citó una orden judicial altamente secreta emitida en abril, de la cual indicó haber obtenido una copia, donde se muestra por primera vez que bajo el gobierno de Obama se recogen indiscriminadamente y en grandes cantidades los registros de comunicaciones de millones de ciudadanos estadounidenses, independientemente de que sean o no sospechosos.
Esto es otra prueba de hasta qué punto los derechos democráticos fundamentales son secretamente sometidos a las exigencias de agencias de inteligencia sin control, dijo Jameel Jaffer, subdirector legal de la Unión Estadounidense por las Libertades Civiles (ACLU).
Pero esto no es nuevo y en ese sentido Obama no hace más que seguir el ejemplo de sus antecesores.
Por ejemplo, Electronic Frontier Foundation, un grupo sin fines de lucro sobre derechos en el área digital, indicó que el monitoreo generalizado doméstico en todas las grandes empresas de telecomunicaciones estadounidenses se realiza desde hace al menos 7 años, cuando George W. Bush ocupaba la presidencia.
El director jurídico de Verizon se limitó a subrayar en un comunicado que la empresa está legalmente obligada a obedecer tal orden, y que no está autorizada a divulgar su existencia.
Este afán paranoico de desconfiar hasta de sus propios ciudadanos no es exclusivo de los países ricos.
También se sabe que el presidente ecuatoriano, Rafael Correa -quien le ha ofrecido asilo a Edward Snowden y al periodista y activista Julian Assange, fundador del sitio on line de filtraciones Wikileaks-, compró a una compañía israelí, registrada en Estados Unidos, equipos de interceptación y escucha de llamadas y comunicaciones por teléfono celular.
No nos extrañe que algún día se sepa que también las autoridades mexicanas espían a sus ciudadanos de a pie, no necesariamente a diputados, senadores o personajes poderosos. ¿Y las garantías de privacidad? Parece que con la tecnología actual ya no existen.
El Gran Hermano nos observa a todos, pero ojala que esa tecnología se usara para acabar con los secuestradores, narcotraficantes, asesinos, capos e integrantes de las bandas del crimen organizado, el cual según el titular del gobierno de la ciudad de México, Miguel Ángel Mancera, no existen en sus dominios. El sicólogo y neurocientífico, Shlomo Breznitz -especialista en teoría de la negación-, debe estar más que satisfecho que sus teorías se comprueben y el autor británico George Orwell debe estar revolcándose en su tumba.
GRANOS DE CAFÉ
Como muestra de la desfachatez de los políticos abusivos, deshonestos y ladrones que abundan no sólo en el Tabasco de Andrés Granier, sino también en Chiapas -donde se espera que Juan Sabines y su grupo de depredadores, reciban también el peso de la ley-, ahí está el ejemplo siguiente.
Desde la creación del Sistema de Transporte urbano de Tuxtla, SA de CV (SITUTSA) -que supuestamente se alimentaría del biodisel que nunca se produjo en Chiapas, y sólo fue una mentira del gobierno sabinista, que tuvo que recurrir a los desechos de aceite de los restaurantes locales para disfrazar el gran engaño del sexenio, como lo fueron las ciudades rurales-, los incondicionales del exgobernador utilizaron la empresa para beneficiarse.
En tan pésimas condiciones fue manejada la compañía de transportes, que todavía no ha resuelto sus adeudos con el Sistema de Administración Tributaria, que desde el 2010 superan los 35 millones de pesos. Y no sólo eso, sino que su ex director general Ezequiel Orduña Morga y su secretario particular Azael Ancheita Calderón, se autoprestaron -y aún no han pagado-, casi millón y medio de pesos, sin contar las gruesas sumas por concepto de viáticos que en los últimos años rebasaron los 509 mil pesos.
Debo subrayar que Orduña Morga fungió como presidente municipal de Tapachula, (2008-2010) y entregó pésimas cuentas, pero por su actitud servil con Sabines fue premiado con la titularidad de SITUTSA, donde cometió un sinfín de tropelías que más adelante detallaremos.
Tal parece que la suerte no le ha correspondido a Tapachula, considerada hace varios años como una de las poblaciones más desarrolladas, limpias, ordenadas y bien administradas de Chiapas. Hoy, la ciudad es un desastre y su imagen urbana parece calcada más bien de un ghetto de Rwanda. Y nada se ha hecho para mejorar, como lo señalé en días pasados.
Sin embargo, estos comentarios no han sido bien tomados en cuenta, y resulta que los escuderos de Samuel Chacón Morales hoy encargado de la presidencia de Tapachula-, consideran simplemente que mis acotaciones sobre el atroz estado que guarda la ciudad, se deben a que estoy molesto.
Y cómo no molestarse. Seguramente que Chacón y sus ayudantes -la mayoría gente sin nivel, como casi todo su gabinete-, deben estar satisfechos de cómo a 6 meses de haber tomado posesión, siguen en la inercia -como lo dije en mi columna pasada-, culpando de todo al hoy presidiario Emmanuel Nivón, ex presidente municipal anterior y compadre del exgobernador Juan Sabines.
Habrá que ver de dónde salieron los recursos para la campaña de Samuel Chacón y cuánto aportó Sabines, que como todo mundo sabe, actuó como el fiel de la balanza para imponer candidatos en todo los partidos, sin el menor pudor político y seguramente entre ellos estaría la postulación del propio presidente tapachulteco, ex diputado local por el XVIII Distrito.
Es muy triste, pero, tal parece que los tapachultecos tendrán que soportar las permanentes lamentaciones un ex integrante del Congreso local -convertido en presidente municipal-, que con sus votos a favor como legislador, le dio manga ancha a Sabines para hipotecar el futuro de los chiapanecos Sus comentarios envíelos vía internet a la dirección [email protected]