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TAPACHULA,Chis.,17 de julio de 2019.- Vecinos de la Octava sur entre cuarta y sexta poniente, exigieron reubicar las oficinas de la Comisión Mexicana de Ayuda Refugiados (Comar), debido a que cientos de migrantes han provocado focos de contaminación, incremento de basura e inseguridad en la vía pública desde hace dos años que abrió sus puertas en este lugar.
Verónica Ortiz, una de las vecinas, que vive alado de este inmueble informó que en esas oficinas federales, se mantienen cientos de migrantes de Honduras, El Salvador, Africanos y Haitianos
“A altas horas de la noche, hay un olor característico como mariguana y la verdad afecta a los vecinos sin dejar de decirle que alrededor de las dos de la mañana están tomando bebidas alcohólicas causando malestar entre los que viven en esa calles”
Los migrantes en su mayoría improvisan casas de campaña para establecerse en las banquetas, calles y avenidas cercanas a esta oficina, para poder obtener un turno y una cita que les permita obtener el refugio.
“Estamos cansados de tantos inmigrantes, nuestras calles están inundadas de basura, aparte no hay vigilancia para los que viven en la octava sur, todavía tenemos que pedirles de favor que me den espacio para poder salir de mi vivienda, se enojan y no respetan”, denuncio Beatriz Catosol, vecina de la misma colonia centro.
Los inconformes, advirtieron que tomaran medidas más drásticas porque ya están cansados de la presencia de los extranjeros “nos dejan pañales, botellas de refrescos y de alcohol, por lo que no es justo que el municipio, no haga caso a la petición”.
Algunas familias en su mayoría de honduras y El Salvador, duermen en las ceras, banquetas, muchas veces obstruyendo el acceso de las viviendas, situación que ha molestado a los propietarios de las casas.
Al no haber baños y regaderas para que los migrantes puedan hacer sus necesidades, los extranjeros optan por hacerlo en las esquinas de las calles, en las banquetas o calles aledañas a la Comisión Mexicana de Ayudar a Refugiados (Comar), lo que ha despertado el malestar de la población que vive en la perla del Soconusco.
Irene Escobar, comerciante y propietaria de una tortillería, denuncio que los extranjeros a las afueras de su negocio se bañan, hacen sus necesidades, dejan su basura y lo preocupante es que se vende alimentos como es la tortilla.
“No tengo nada contra ellos, pero han asaltado a mis empleados en la mera puerta de mi tortillería, antes abríamos un poco más temprano, pero debido a eso se apertura el negocio un poco más tarde”
La comerciante, estimo que a diario se atienden entre unos 200 a 300 personas, lo que se convierte en un caos total, porque todas las personas tienen que ir a realizar sus necesidades y no hay baños.
Recordó que al principio se les invitaba agua, tortillas y alimentos, pero ahora el problema es el acumulamiento de la basura y el fuerte olor a los fluidos.
El grupo de vecinos, demandaron a las autoridades municipales, que se refuerce la vigilancia y se instale alumbrado público.Asimismo a la Secretaría de Gobernación (Segob) que reubique a las afueras de la zona de la ciudad, para que puedan atender a los grupos de migrantes.
Son al menos 10 cuadras a la redonda que se unirán para pedir a las autoridades federales para su reubicación.