
Eduardo Ramírez presenta al Gabinete de Seguridad que lo acompañará en su gobierno
En febrero del 2014 se cumplieron 29 años en que el Mercado Laureles abrió por primera vez sus puertas, en un proyecto que se convirtió en poco tiempo en un elefante blanco de los gobiernos en ese entonces de Joaquín del Pino como presidente Municipal, y de Absalón Castellanos como Gobernador del Estado.
Ahora este edificio sufre el deterioro por la falta de atención de las autoridades y la falta de estrategia de algunos comerciantes para impulsar a este mercado y hacerlo productivo.
Los locatarios que aun confían en este mercado, y que algunos son fundadores del mismo, denunciaron las bajas ventas que los tiene al borde del colapso económico, y pidieron a las autoridades municipales, diseñar una estrategia para revivir este edificio que se proyectó al principio como un importante centro de abasto.
La infraestructura del edificio comienza a ceder por el paso del tiempo pero los comerciantes confían en que algún día las autoridades municipales voltearán los ojos, y hagan algo por mejorar las condiciones de los locatarios.
Los comerciantes del mercado mencionaron que la mayoría de los locales se encuentran vacíos, pero no siempre fue así, ya que los comerciantes recuerdan que hubo momentos en la vida de este inmueble, en que las ventas daban para vivir holgadamente, pero ahora ya no es así.
Actualmente este mercado auspicia oficinas del gobierno municipal y el banco de alimentos, pero los comerciantes sueñan con que este mercado por fin pueda superar el letargo comercial y se convierta en una central de abasto que Tapachula necesita en esta zona de la ciudad.