Libros de ayer y hoy
El respaldo electoral a MORENA en las recientes elecciones, nos obliga a dirigentes y militantes, a obrar con absoluta responsabilidad y a construir una estrategia para el fortalecimiento y continuidad institucional del partido centrada en cinco pilares fundamentales: la unidad, la legalidad, la consolidación del trabajo social, la preparación para el futuro y el compromiso político para lograr la prosperidad compartida que demanda México.
Construir un partido fuertemente cohesionado en el que todas y todos los compañeros compartamos un objetivo político común: la prosperidad compartida a la que se ha referido la Presidenta Electa de México, Claudia Sheinbaum Pardo.
El derecho a la información es vital para tal propósito. Es necesario que el partido haga uso de todos los medios de comunicación posibles, particularmente de las tecnologías de la información, que permitan a los ciudadanos y militantes acceder transparentemente a todas las acciones del partido.
Es la participación ciudadana el elemento crucial para consolidar al movimiento en su etapa de Gobierno.
Tenemos que abrirnos a la etapa de la deliberación social y política desde las bases del partido desde una profunda formación política.
Construir espacios de debate, diálogo y comunicación para fortalecer ideológicamente la conexión entre el partido y el pueblo de México.
El foro social y político de nuevas ideas y perspectivas del humanismo mexicano.
Es vital acelerar la gran labor que se ha realizado desde la escuela de cuadros en la formación y capacitación no sólo en lo ideológico sino también en el ejercicio de Gobierno.
Diversos programas de formación que unan la conciencia política humanista con las capacidades para gobernar la Federación, los Estados y los Municipios.
La prosperidad compartida obliga a los cuadros gobernantes en los tres órdenes de gobierno a impulsar políticas sociales y humanistas para una nación más justa e igualitaria.
Llegó el momento de construir un partido unido, consolidado y preparado para el México del siglo XXI. Un partido fortalecido en su estructura interna, con la mayor participación ciudadana, y respetuoso de su legalidad.