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SAN LUIS POTOSÍ, SLP., 13 de julio de 2020.- Este lunes se cumple el 66 aniversario del fallecimiento de Frida Kahlo, una de las pintoras mexicanas más importantes y reconocidas en el mundo entero, gracias a que en sus obras, pertenecientes al surrealismo mexicano, mostró siempre los hechos que marcaron su vida aunque estos hayan sido sumamente dolorosos. Nació el 6 de julio de 1907 bajo el nombre de Magdalena Carmen Frida Kahlo Calderón en la Ciudad de México, en la casa que fue propiedad de sus padres desde 1904 y que hoy es la famosa Casa Azul. Hija de Wilhelm Kahlo, de ascendencia húngaro-alemana, y Matilde Calderón, originaria de Oaxaca, Frida fue la tercera de cuatro hijas. Como es conocido, a los seis años Frida enfermó de poliomielitis, causándole que su pierna derecha quedara más corta. Sin embargo, uno de los acontecimientos que tuvo consecuencias terribles para la pintora fue el accidente de autobús que sufrió el 17 de septiembre de 1925, cuando tenía 18 años. El autobús en el que viajaba fue arrollado por un tranvía, quedando aplastado contra un muro y completamente destruido. Debido a esto, la columna vertebral de Frida quedó fracturada en tres partes; roturas en dos costillas, en la clavícula y tres en el hueso pélvico. Su pierna derecha se fracturó en once partes, su pie derecho se dislocó, su hombro izquierdo se descoyuntó y un pasamanos la atravesó por la cadera izquierda hasta salir por su vagina. Para poder recuperarse, Frida estuvo sin poder caminar durante tres meses y sufrió treinta y dos operaciones. Debido a su inmovilidad comenzó a pintar gracias a un caballete especial que le facilitaba hacer sus cuadros estando en cama y un espejo colocado en la parte superior que le permitía verse a sí misma. Así es como comenzó a relacionarse con varios artistas, entre los que se encontraba la fotógrafa Tina Modotti y el muralista Diego Rivera. RELACIÓN CON DIEGO RIVERA Para el 21 de agosto de 1929 Frida se casó con Rivera; la pareja vivió en la Casa Azul, así como en el estudio de Diego, en San Ángel. También radicaron en Cuernavaca y en diversas ciudades de Estados Unidos: Detroit, San Francisco y Nueva York. En 1930 sufrió su primer aborto a consecuencia de las lesiones en la pelvis causado por el accidente de autobús, y en 1932 cayó en una profunda depresión al tener un segundo aborto. La artista plasmó el dolor y la tristeza causada por ambos hechos en una de sus obras: Hospital Henry Ford. Es bien conocido que la relación de Kahlo con Rivera fue de lejos perfecta, pues en ella hubo amor, aventuras con otras personas, un vínculo creativo, crisis emocionales causadas por las infidelidades de Diego, así como un divorcio en 1939 para contraer nupcias nuevamente al año siguiente. A pesar de su mala salud y de las operaciones constantes, Frida estuvo involucrada activamente en la política. Fue miembro del partido comunista y fiel activista de izquierda; junto con Rivera, acondicionó la Casa Azul para darle asilo por más de dos años a León Trotsky y a su esposa Natalia, después de que este fuera exiliado de Rusia. RESALTÓ LO MEXICANO Tanto en su trabajo como en su vida diaria, la artista buscó rescatar las raíces del arte popular mexicano, lo que se reflejó en su lenguaje, vestimenta y la decoración de su casa, así como en su propia obra. Al final de su vida, la salud de la artista decayó. De 1950 a 1951 permaneció en el Hospital Inglés, y dos años después tuvieron que apuntarle la pierna derecha por debajo de la rodilla ante la amenaza de gangrena. Frida Kahlo falleció el 13 de julio de 1954 en su Casa Azul, en la Ciudad de México, justo cuando el Instituto Nacional de Bellas Artes le preparaba como homenaje, una muestra retrospectiva. GRANDES OBRAS Algunos de sus cuadros más conocidos y que reflejan buena parte de su vida son Las dos Fridas, Viva la Vida, Unos cuantos piquetitos, La columna rota y Diego en mi pensamiento.