De Primera Mano/Rodulfo Reyes Aguilar

Tarde, pero llegó la «Ley Garrote»

La demanda de castigo a quienes bloquean vías de comunicación y afectan los derechos de terceros, se venía presentando desde finales de los ochenta que el entonces hegemónico PRI se desgajó para dar paso al PRD, que se apropió de lo que se llama ahora ‘izquierda’. La bandera contra ese movimiento siempre fue de los sectores productivos.

La reforma al Código Penal de Tabasco, aprobada el lunes pasado, que endurece las penas hasta con 20 años de cárcel a quienes interrumpan los trabajos de obras públicas y privadas y ‘extorsionen’ en caminos y carreteras, responde a una petición que abanderaron principalmente empresarios.

Quizá lo paradójico de esta adecuación legal sea que le tocó promoverla a la misma ‘izquierda’ que principió las movilizaciones que afectaban a ciudadanos ajenos a los políticos del PRD, cuando en este partido militaba Andrés Manuel López Obrador.

Aunque ahora el presidente del país originario de Tabasco diga que los nuevos bloqueadores de su tierra son unos pillos que extorsionan, la verdad es que la semilla de las manifestaciones se sembró en 1988 que el de Macuspana dimitió al Revolucionario Institucional para integrarse al Frente Democrático Nacional (FDN), que un año después dio paso al partido del sol azteca.

Las bases de los cierres de obras que se padecen hoy día se asentaron hace tres décadas.

La semana pasada que se consumó la adecuación legal que puede mandar a la cárcel mucho tiempo a los líderes que están detrás de estas movilizaciones que afectan a toda la comunidad, los primeros en manifestar su beneplácito fueron las organizaciones gremiales de los sectores productivos.

Esto hizo que regresáramos al pasado, cuando en el gobierno del priísta Roberto Madrazo Pintado se quiso aplicar la ley a quienes sitiaban instalaciones petroleras, y eran las cámaras empresariales las que hacían manifiestos públicos para agradecer al jefe del Ejecutivo por disolver los plantones con la policía.

Ahora que un gobierno de ‘izquierda’ retomó la política del garrote empuñada por Madrazo, los inversionistas se muestran complacidos.

Quizá si se hiciera una encuesta a la población abierta sobre la puesta en marcha de la llamada ‘Ley Garrote’, la mayoría va a estar a favor, pues se trata de un tema que por muchos años dividió a Tabasco.

Por un lado estaban los “bien nacidos”, término acuñado por el priísta Manuel Ordóñez Galán, que eran quienes daban la lucha contra los perredistas que obstaculizaban vías de comunicación.

Los “de abajo”, los seguidores de AMLO, pues, eran los “malnacidos”, de acuerdo con la división de clases que hizo el prominente constructor para diferenciar a quienes “querían a Tabasco” y quienes “cerraban pozos y carreteras”.

IVONNE ORTEGA, LA SORPRESA

Aunque para muchos es inminente en Tabasco el triunfo de Alejandro Moreno Cárdenas, más conocido como ‘Amlito’, no debe perderse de vista que Ivonne Ortega puede dar la sorpresa.

La razón por la que la exgobernadora de Yucatán podría mover la intención del voto es el apoyo que le está dando el exmandatario Andrés Granier Melo, quien revivió a sus estructuras ahora que logró su libertad, tras casi seis años en prisión por venganza del expresidente Enrique Peña Nieto y del exjefe del Ejecutivo local, Arturo Núñez Jiménez.

El químico de profesión le pidió a sus seguidores que le den el voto el 11 de agosto a Ortega, ya que es la mejor opción en estos momentos para dirigir al PRI.

A ‘Amlito’, apodado así por su presunta cercanía con López Obrador, lo apoyan los barones del priísmo choco, pero los que votan son los priístas de a pie y estos son los que siguen a Granier y que a su vez van a cruzar la boleta por Ivonne.

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