
La espera que no alcanza para decirle adiós al Papa
TECÚN UMÁN, Guatemala, a 28 de octubre de 2018.- La iglesia católica en Guatemala, mostró su preocupación por el éxodo de centroamericanos que arriba en las últimas horas a Tecún Umán en busca de cruzar la Frontera Sur.
Alfredo Camarena, vicario parroquial de Ayutla, San Marcos, advirtió que puede desencadenar una oleada de migrantes.
Sin embargo dijo que en su caminar la caravana expone a los niños y mujeres por lo que señaló que esta migración se debe hacer de la mejor manera, ordenada y legal para evitar algún incidente.
El alto jerarca de la iglesia católica, dio a conocer que antes no se había presentado esta oleada masiva de migrantes provenientes del triángulo del norte de Centroamérica.
Refirió que como católicos se ha sumado atender la emergencia migratoria.
“Ellos llegan por la desesperación de su país de origen, al no tener empleos, la inseguridad, la violencia y la falta de oportunidades, los obliga a salir a poner en riesgo la vida de sus hijos quienes son los más vulnerables”.
Camarena, dijo que como feligreses se han solidarizado otorgando alimentos a las familias en su mayoría de Honduras que se encuentran en el parque central de esa localidad fronteriza con México en espera de un mayor contingente de compatriotas para poder determinar que acciones tomar para alcanzar a la caravana que busca llegar a la Frontera norte.
“Anoche la cena fueron más de mil 600 cenas que se repartieron, “nosotros hacemos lo que podemos, damos tres comidas a los migrantes”.
Invitó a la comunidad católica cercana a la Frontera Sur y en Tecúm Umán, a donar alimentos, agua, medicinas y platos de plástico que se requieren para seguir otorgando la ayuda a los migrantes.
El alto jerarca del santuario, justificó que México militarizo su frontera, para evitar que se desencadene oleadas migratorias de todos los países y para que se realice una migración ordenada y no irregular.
Apenas este viernes, más de 200 migrantes centroamericanos fueron detenidos por agentes migratorios apoyados de la Policía Federal para ser llevados a la Estación Migratoria siglo 21.