En las fiestas del barrio/Emiliano Pérez Cruz

Nezahualcóyotl, 6 de octubre, 2016.- Los chamacos se arremolinan. Es domingo y, además, aniversario del Santo Patrono del Mercado del barrio o de la colonia. Desde temprana hora los cohetones anunciaron la misa, especial para los locatarios, y semanas antes arribaron y se instalaron los de la feria con sus juegos mecánicos.

Entre semana y mientras llega la fiesta, los juegos mecánicos giran y giran para que los chiquillos de las escuelas vecinas suban pagando al dos por uno; aprovechen que es oferta, es promoción. Rueda de la fortuna, chicote, sillas voladoras, trabant, tiro al blanco, aros, caballitos (los grandotes y los chiquitos), remolino… Escojan su juego, señores.

El mero día llegaron los mariachis y frente a la capilla construida al centro del mercado, entonaron Las Mañanitas en honor al festejado y a media mañana llegan los danzantes a quienes convocó doña Ifigenia, quien casi toda su vida ha bailado y transmitido a sus familiares e interesados los secretos de su gusto, de su pasión.

El mercado los aguarda vestido de fiesta, con sus pasillos bien barridos desde temprana hora, los puestos adornados con pliegos de papel picado, la entrada principal con ramas de palmera verde esmeralda que tiende su frescor a los marchantes, pásenle marchantitos.

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