
Ningún puesto y ninguna aspiración valen una vida: Rocío Nahle
SAN CRITÓBAL DE LAS CASAS, 23 de junio de 2015.- Con todo respeto, los empresarios saben de utilidades (de sumar y sumar, nunca restar); no saben gobernar. Pruebas sobran. El ejemplo más desastrozo es Francisco Martínez Pedrero, en San Cristóbal de Las Casas.
Heredero al igual que Rómulo Farrera de uno de los más grandes capitales de Chiapas. Dueño de tierras, edificios, hoteles y bares. Provenía de presidente de la Asociación de Hoteleros… y su administración fue un desastre.
No saben nada de gobernanza y gobernabilidad. Desfalcó como nadie las arcas públicas para incrementar su propio patrimonio. Hoy la Federación audita al Ayuntamiento por probable desvío de recursos publicos.
No terminó su mandato por su ambición política. Engolosinado por el poder, dejo la presidencia municipal para ir por una diputación, primero federal, luego local; al final no le tocó nada. El PRI (al que se afilió al dejar el PAN) no le dio la oportunidad.
Despestigia la política y al propio PRI. Y aún más, ademas del desaseo evidente en el manejo de las finazas públicas dejó adeudos a proveedores estimados en 250 millones de pesos.
Es empresario y es rico; tiene poca formación académica… al igual que el mentado Rómulo Farrera. Y al igual que hoy dicen de Rómulo Farrera se decía de Martínez Pedrero que por ser adinerado no necesitaba robar…
¿Tiene o no Francisco Martinez Pedrero un perfil parecido a Rómulo Farrera?