Eduardo Ramírez relanzará el Plan Nescafé en Chiapas
Leticia contó que aunque este oficio les genera muy poco dinero, pretenden que con esta actividad se evite la contaminación al medio ambiente.
La idea la trajo su marido Javier, de Chihuahua, de donde es originario y decidieron realizar este trabajo en su domicilio localizado en San Bartolo Coyotepec, municipio de la región del Valle Central de Oaxaca.
Con las llantas realizan diversas figuras como columpios, jarras, figuras de animales como pájaros, tucanes, jirafas, gusanos, sillas mecedoras, entre otros.
«Nos lleva de uno a 3 días hacer las figuras porque hay que cortar, limar, pintar con pintura de aceite la llanta y entre otras actividades que complican este arte», dijeron.
No obstante, pese al tiempo invertido las figuras apenas llegan a costar entre 100 y 150 pesos y logran vender no más de 5 al mes.
«A la gente le falta esta idea de contribuir con el medio ambiente, de querer cambiar las cosas y son muy pocos quienes realmente buscan contribuir en reciclar las llantas. Con una llanta que no se tire o se queme estamos evitando la contaminación», dijo.
Ellos obtienen las llantas de talacherías y también de algunas donaciones que les hacen para que de esta manera se le dé un uso a este material altamente contaminante.