TELEFONO ROJO/JOSE UREÑA

TELEFONO ROJO

· Un PRI a imagen y semejanza de Enrique Peña

· Madero se dedica a borrar huellas de Calderón

· Bejarano y Los Chuchos: izquierdas sin El Peje

Hayan ganado o perdido, los dirigentes partidista pueden estar tranquilos.

Todos comandarán las transformaciones de sus respectivas organizaciones.

Comencemos con el triunfador.

Pedro Joaquín Coldwell llegó de emergencia cuando Enrique Peña Nieto aceptó la necesidad de deshacerse de Humberto Moreira por la embestida del gobierno federal y del PAN por el endeudamiento de Coahuila.

Hizo un trabajo discreto.

Peña Nieto navegaba sobre aguas de éxito, su coordinador Luis Videgaray mantenía su estrategia de discreción y la embestida de la oposición no fue suficiente para apearlo de su condición de favorito.

El lunes 2 de julio, cuando se había confirmado la victoria priísta, Peña Nieto buscó a Joaquín Coldwell y le agradeció:

-Pedro Joaquín, mil gracias. Vamos para adelante.

-A tus órdenes, Enrique. Muchas gracias.

-Me da mucho gusto tener un dirigente como tú. Es un honor…

Y ambos sellaron su entendimiento con un abrazo y todo quedó claro; Joaquín Coldwell seguirá al frente del partido y organizará su próxima asamblea y marcará el cambio, la renovación del PRI.

-La cuarta etapa –le llaman ya en el equipo de Peña Nieto.

Será un PRI a imagen y semejanza de Peña Nieto.

PEDRO JOAQUIN NO VA AL GABINETE DE PEÑA

A los priístas les queda claro el mensaje:

Pedro Joaquín Coldwell seguirá al frente del PRI para determinar cuál será el tipo de partido para acompañar al próximo presidente y desde esa posición apuntalar al próximo presidente.

Es decir, no irá al gabinete.

Así se rompe una tradición.

Todo presidente del PRI en campaña era incorporado sin mayor trámite al equipo del presidente en turno para reconocerle su participación en campaña.

El último caso fue Ignacio Pichardo Pagaza, imposición de Carlos Salinas a quien Ernesto, para no ocultarlo, Zedillo mandó a la Secretaría de simular cierto aprecio y reconocimiento.

En meses lo destituyó y lo mandó al exilio como embajador en los Países Bajos.

Los panistas han sido menos pulcros.

Vicente Fox no abrió espacios para Luis Felipe Bravo Mena, quien como dirigente del PAN abrió la puerta de Los Pinos para la oposición en 2000.

Eso sí, lo reconoció en 2005, al terminar su segundo período al frente del PAN, como representante del gobierno mexicano ante la Santa Sede, de donde lo rescató Felipe Calderón para hacerlo su secretario particular y luego mandarlo a una derrota humillante en el estado de México ante el priísta Eruviel Avila.

Peor le fue a Manuel Espino.

Ganó la campaña de 2006 para Calderón, pero por oponerse a alianzas poco recomendables como la de Elba Esther Gordillo, fue defenestrado como dirigente panista y enviado a la oposición.

Hoy forma su fuerza política para enfrentar al PAN.

LOS CHUCHOS BORRARÁN HUELLAS DEL PEJE

Los demás dirigentes tienen en su mano la suerte de sus partidos.

Gustavo Madero se ha ganado el derecho de definir el futuro del PAN por haberse enfrentado con éxito al presidente Felipe Calderón, quien pretendía mantener el control del partido por largo tiempo.

Madero enfrentó a Calderón, controló al Consejo Nacional e impidió la injerencia de Los Pinos para modificar estatutos en octubre de 2012 y renovar al Comité Ejecutivo Nacional.

Eso se irá hasta marzo o abril de 2013, en los términos decididos por grupos anti calderonistas cuyo poder es creciente y con un eje: borrar toda influencia del presidente actual.

Eso deja fuera a los tres prospectos a dirigentes de Calderón: Margarita Zavala, Luisa María Calderón y Salvador Vega Casillas.

El vaticinio está claro: el próximo PAN no tendrá ni sombra de Calderón.

En el PRD los vientos son favorables para Los Chuchos Jesús Ortega y Jesús Zambrano.

Ido Andrés López, nadie les compite el poder.

Ni Marcelo Ebrard ni su tutor Manuel Camacho, quien a estas alturas trata de asustar con el petate del muerto: o el PRD se reforma o desde ahora estará facturando la representación de la izquierda para López y su Morena.

Todos se llevarán una sorpresa.

Ni El Peje ni los pejistas tendrán cabida en el PRD de Los Chuchos.

Y algo más: René Bejarano y su IDN estarán más activos en el PRD en coordinación con Los Chuchos.

Malas noticias para López.