Teléfono rojo
TELEFONO ROJO
· Madero hila para mantenerse al frente del PAN
· Josefina se incorpora la comité que la traicionó
· Temor a la popularidad Margarita y Luis María
Gustavo Madero busca con desesperación un asidero.
Quiere continuar al frente del Partido Acción Nacional (PAN) y las cosas no se le dan:
Condujo mal las campañas culminadas en julio.
Despeñó al PAN al tercer lugar a pesar de detentar el poder federal desde diciembre de 2000.
Descuidó a valores significativos y estos prefirieron jugar en otros frentes, como fue el caso del ex presidente Vicente Fox, abiertamente colocado con Enrique Peña.
Si eso benefició al mexiquense o no, es secundario, pues algunos priístas lo vieron como un beso del demonio por el descrédito del guanajuatense y su fama de lengua larga.
Madero también desatendió, por no decir abandonó, la presidencia panista cuando más lo necesitaba la candidata presidencial Josefina Vázquez, quien fue la mayor perdedora.
Derrotado en la presidencial y relegado en las cámaras del Congreso, Madero no ha sabido o no ha podido- aglutinar a cuadros importantes para la militancia.
Tampoco ha mandado un mensaje de rediseño panista para empezar a preparar el debate y llegar con un proyecto sólido para el consejo del 11 de agosto.
Ese día se jugará el destino como dirigente y no es seguro el respaldo de quien lo llevó a la posición donde está.
CORDERO Y EL MADRUGUETE PRESIDENCIAL
Los demonios aparecen por todos lados.
Estatutariamente Gustavo Madero tiene el derecho absoluto de designar coordinadores parlamentarios, pero unos ya se le adelantaron y otros se le han alebrestado.
La coordinación de la fracción panista en el Senado de la República está decidida y la decisión fue tomada en otra parte, no en su oficina.
Será Ernesto Cordero, a quien a línea presidencial no pudo convertir en candidato presidencial porque venció la avalancha de la militancia favoreció a Josefina Vázquez.
La burocracia sí cubrió a Cordero, pero Madero incumplió la orden de ayudarle a construir una candidatura exitosa porque no pudo generarle las simpatías necesarias con los miembros y adherentes azules.
Ayer la señora de falda pero con muchos pantalones fue llamada para mandar un mensaje de unidad.
El nombramiento de coordinadora de Acción Política supone cesión de ambas partes: Madero aceptará su contrapeso en espera de la orden superior y ella deja de momento la pretensión de presentarse como la gran reestructuradora del PAN.
Vázquez ya es parte del organigrama del comité al cual acusó de abandono y causante de su derrota.
-Causantes somos todos los panistas refuta Madero.
ENTRE LA MILITANCIA Y EL CALDERONISMO
En la desesperación, Gustavo Madero ha iniciado una campaña de convencimiento con miembros del consejo.
-No conviene cambiar ahora de dirigente nos insiste, afirman varios de ellos.
Lo ideal es ratificarlo como presidente, mandar un proyecto de cambio y esperar hasta fin de año a tomar las decisiones tanto para designar al nuevo presidente del PAN como el modelo de organización política.
En tanto, les propone hacer un análisis de la derrota de julio, pero no presenta un guión para saber cuál dirección van a tomar y cómo dar los primeros pasos.
Sí les dice, en cambio, la abierta intención de Los Pinos de hacerse del partido y de cómo se ausculta la imagen de personas muy ligadas a Felipe Calderón.
Dos nombres circulan entre esos consejeros: Margarita Zavala y Luisa María Cocoa Calderón.
La esposa del presidente goza de buena fama y, de acuerdo a su marido, sería una magnífica candidata presidencial ¿en 2018?
Ahí está una señal.
Cocoa tiene otras aspiraciones.
Dirigir al partido la mantendría en primera línea para, posteriormente, ir por segunda ocasión en pos del gobierno del estado de Michoacán.
La medición de luchas apenas empieza y el 11 de agosto se tendrá la primer señala: o el PAN pasa a la militancia o sigue calderonista.